Jaume Costa y Florenzi se despiden de forma muy distinta
El valenciano y el italiano han dicho adiós al conjunto che, en el que no continuarán al concluir sus cesiones, y Costa ha hablado sobre algunas polémicas del club.
Punto y final al viaje de Jaume Costa y de Alessandro Florenzi en el Valencia. El valenciano y el italiano se han despedido hoy de la entidad che después de sus respectivas etapas en el equipo. Sus temproadas temporadas han sido muy diferentes, Jaume Costa ha jugado 25 partidos y ha demostrado ser un recambio de garantías. Florenzi por su parte no ha podido enseñar todo lo que tenía entre el Covid-19, la varicela que padeció y la expulsión que le hizo perderse otro partido, no obstante ha dejado destellos de que podría haber tenido cabida en el club.
Y si su cursos han sido diferentes, sus despedidas más si cabe. El italiano ha tenido palabras de agradecimiento a la entidad y especialmente a la ciudad, aunque ha recordado de forma sensible la dura etapa del Coronavirus que todo el mundo ha atravesado: "Debíamos afrontar en el campo a muchos equipos, pero después nos encontramos todos juntos jugando en un solo equipo contra un adversario inesperado y maldito".
Pero Jaume Costa se ha despedido de una forma tajante y sin dejar indiferente a nadie. El valenciano como es lógico ha dejado constancia de que para él volver al equipo che ha sido todo un sueño al igual que "recibir el cariño de la afición" o "jugar la Champions con el Valencia". Sin embargo, no ha eludido las cuestiones más sensibles de la actualidad valencianista.
"No hay excusas que puedan suavizar el final de temporada tan horroroso que hemos hecho, pero si hay acciones y hechos que condicionan el día a día de un vestuario" ha relatado el ya jugador del Villarreal en clara alusión a las polémicas existentes entre la plantilla y la directiva che. Además y de nuevo en clara referencia a la tensión entre las partes mencionadas, Jaume ha querido concluir su despedida elogiando a sus compañeros "sois un grupo fantástico", y recalcando que "no dejéis que nadie os diga lo contrario".