1x1 del Barcelona: los 'niños' le dan la razón a Setién
Partidazo de Riqui Puig, con dos asistencias; eficaz en ataque Ansu Fati, con gol incluido; y contundente en defensa Araujo. Messi, a lo suyo, dos goles y una asistencia.
Así fue la actuación de los jugadores del Barcelona en la contundente victoria ante el Alavés para cerrar la Liga.
Neto: Era su segundo partido en LaLiga y ha pasado totalmente desapercibido, ya que el rival no le chutó en ninguna ocasión entre los tres palos. En alguna salida se mostró algo dubitativo, pero valorarlo hoy resulta del todo imposible al registrar cero intervenciones en todo el partido.
Sergi Roberto: Potente físicamente y sobrado de fuerzas, el de Reus se mostró muy activo, sobre todo a la hora de encontrar soluciones en la banda derecha. Setién lo adelantó con la entrada de Semedo, donde supo moverse muy bien entre líneas, buscando siempre a un especialmente activo Messi.
Araujo: Ejemplar. Rápido, contundente, aseado con el balón e inteligente en la anticipación. El central uruguayo tiene una planta descomunal y a poco que gane en experiencia promete ser un jugador de altísimo nivel.
Lenglet: La noticia negativa del partido, ya que el francés tuvo que abandonar el partido nada más empezar la segunda parte quejándose de molestias en el aductor derecho. Ahora mismo cualquier contratiempo de más de tres semanas podría poner en serio peligro su presencia para la Champions.
Alba: Volvió por fin la conexión con los delanteros. Dio para empezar una gran asistencia a Suárez para que rematara a placer de cabeza y acabó con otra, aún más brillante, a Messi para que cerrara la goleada. El lateral necesitaba un partido así.
Sergio Busquets: Setién lo va a echar de menos y mucho de cara al partido ante el Nápoles. Todo lo hace bien y todo lo hace fácil. Esperemos verlo esta temporada más partidos como blaugrana porque eso querrá decir que el Barcelona ha eliminado al Nápoles y está en Lisboa.
Riqui Puig: Superlativo. Tenemos a un genio de un talento descomunal delante. Su frágil cuerpo no le impide adueñarse del mediocampo con una facilidad sobrecogedora. Además no se le caen los anillos a la hora de defender. Dio dos asistencias: una a Messi y otra a Semedo. Suárez desaprovechó un pase de orfebrería que le dejó solo ante el portero. El mejor del partido y eso que finalmente no marcó, pese a que envió un remate espectacular que se estrelló en el larguero. Ahora mismo todo lo que no sea su titularidad en el próximo partido de la Champions es un insulto al sentido común.
Arturo Vidal: La palabra polivalencia está escrita en la frente del jugador chileno. Sólo un dato para refrendar esta conclusión: jugó toda la segunda parte como central y además no lo hizo más, aunque estuvo cerca de cometer algún penalti en su exceso de celo e ímpetu. Antes de retrasar su posición envió un balón al larguero tras un extraordinario remate.
Messi: Otro día más en la oficina para el mejor jugador del mundo. Dos goles y una asistencia para poner punto y final a una Liga triste, ya que el equipo dejó escapar el título tras el confinamiento. El argentino además remató otra vez al palo tras una gran jugada personal, donde iba perfilándose a la portería. El primer gol llegó tras un gran pase de Riqui Puig y el segundo tras recuperar la conexión con Alba.
Suárez: Está lento, falla goles cantados, a veces camina medio cojo, sigue quejándose por todo, sus pases muchas veces no son del todo precisos, pero aún así es imprescindible en el equipo. Marcó un gol de cabeza, hizo un movimiento inteligente en el último gol de Messi y siempre fue una referencia en ataque.
Ansu Fati: Hizo lo más difícil para un delantero: abrir el cerrojo. El joven delantero tiene duende en las botas y siempre tiene cosas que ofrecer en un terreno de juego. Estamos ante un talento natural que pese a los pocos minutos que cuenta se sale en todas las estadísticas habidas y por haber.
Sustituciones
Semedo: Marcó su segundo gol como blaugrana tras una gras asistencia de Riqui Puig.
De Jong: Jugó treinta minutos, refrendando las buenas sensaciones de cara al partido ante el Nápoles de Champions. Pecó un poco de exceso de conducción cuando participó como pivote defensivo. Dio recursos y alternativas múltiples al juego asociativo del equipo.
Braithwaite: En su último partido como blaugrana estuvo cerca de marcar tras una gran asistencia de De Jong, pero finalmente el balón pasó rozando el poste.