Los fichajes de enero empiezan a darle réditos al Deportivo
Uche Agbo y Vallejo brillan y se suman al rendimiento y los goles de Sabin Merino para acercar al conjunto blanquiazul a la permanencia.
El Deportivo cerró 2019 con un triunfo, pero con el sabor amargo de verse a siete puntos de la permanencia y con un pie en Segunda B. Por ello, el recién llegado a la presidencia Fernando Vidal lo apostó todo al mercado de invierno con un préstamo de Abanca para ampliar el tope salarial y reforzar la plantilla en busca del milagro. El equipo reaccionó con la llegada de Vázquez y resucitó en enero, aunque no por la participación de los fichajes.
Sabin Merino fue decisivo con cuatro goles en sus primeros cuatro partidos, pero más allá de los detalles de Çolak, el resto de refuerzos apenas estaban aportando. Los Keko, Uche Agbo o Vallejo habían llegado lejos de su mejor forma y el técnico de Castrofeito trataba de ponerlos a punto a marchas forzadas.
Cuando las fuerzas aflojaban, llegó el parón por el coronavirus que se vio en el Depor como una oportunidad para reagruparse y salir más fuertes, presumiendo de fondo de armario. Y la paciencia empieza a darle la razón.
Uche y Vallejo, criterio y desequilibrio
Sabin ha perdido efectividad de cara a puerta, pero sigue haciendo todo lo que se le pide a un delantero. Pero además, el vasco ya no está solo en ese grupo de recién llegados, ya que se le han sumado Uche y Vallejo. Que el Depor remontase ante el Rayo y derrotase ante el Elche tiene mucho que ver con estos dos jugadores. La presencia del nigeriano en el centro del campo está siendo decisiva en defensa y ataque, y el jugador cedido por el Madrid ha dado una asistencia y marcado un gol en los últimos cuatro días.
La tarea pendiente de Vázquez ahora es enchufar también a Keko y Beauvue, que hasta el momento no están teniendo demasiada fortuna en sus apariciones. Si logra sacarles rendimiento y recupera al mejor Çolak, el poderío del conjunto blanquiazul se multiplicaría en este final de curso.