Diez años del ascenso más agónico
En mayo de 2010 la Deportiva subía por segunda vez a la división de plata eliminando al Sant Andreu tras 18 penaltis.
Este 23 de mayo se cumplen diez años del segundo ascenso de la Ponferradina a Segunda División, recordado por todos los blanquiazules por la agónica tanda de penaltis ante el Sant Andreu en El Toralín que se decidió favor de los bercianos gracias a una parada de Mackay en el decimoctavo lanzamiento.
La Deportiva, entrenada por José Carlos Granero, se había proclamado campeón del grupo I de Segunda B con solvencia, aventajando en nueve puntos al Eibar, y el sorteo deparó un enfrentamiento con el campeón del grupo IV, el Sant Andreu barcelonés que por aquel entonces presidía Joan Gaspart.
En la ida, jugada a mediodía bajo un intenso calor en la Ciudad Condal, un gol de Jonatan Valle en la segunda parte dejó a la Ponferradina con una engañosa, como luego se demostró, ventaja para afrontar el partido decisivo en El Toralín.
La euforia se contagió por toda Ponferrada en los días previos al choque y el estadio blanquiazul presentó un lleno absoluto dispuesto a celebrar un ascenso que se había escapado los dos años anteriores frente al Alicante y el Real Jaén. Sin embargo, el ambiente pesó en los de Granero, que aguantaron el empate inicial hasta que en el minuto 82 un gol de Amarilla con la colaboración involuntaria de un defensa a la salida de un córner silenció El Toralín y envió la eliminatoria a la prórroga.
Después de 30 minutos sin goles, llegó la recordada tanda de penaltis en la que se lanzaron hasta nueve por equipo hasta que, finalmente, Mackay adivinó por dónde iba a ir el lanzamiento de Tarradellas para devolver a la Deportiva a Segunda.
El portero coruñés recordaba este sábado en sus redes sociales aquel momento con un vídeo del último penalti y un mensaje: “10 años. ¡Cómo pasa el tiempo! Décimo aniversario del momento futbolístico más bonito vivido hasta ahora. Bonito ascenso en los penaltis con la Ponferradina”.