ProLiga, sobre la decisión de la FEF: "Aún hay mucho por definir"
David Jiménez, su presidente, da en AS su visión sobre el modelo de la RFEF propuesto para el fútbol no profesional. También pide estar en las mesas de trabajo de cara a la remodelación.
La Real Federación Española de Fútbol ha oficializado hoy el modelo de Playoff en Segunda B y Tercera y el fin definitivo a los descensos y a las jornadas restantes de temporada regular. ProLiga, como patronal representante de más de 200 clubes de ambas categorías, reclama al organismo federativo respuestas sobre todas las incógnitas que todavía presenta el modelo aprobado: protocolo de seguridad, qué sucede si hay positivos, fechas concretas... También reclama la presencia en mesas de trabajo con el fin de preparar la remodelación de la categoría y pide respaldo a su decálogo de medidas económicas.
David Jiménez, presidente de ProLiga, en declaraciones a AS busca una solución más concreta a la resolución del fútbol no profesional: "No sería justo ser ventajistas. La decisión de la RFEF no es nada fácil en estas circunstancias. Dicho esto, nos hubiera gustado que hubiera tenido un mayor grado de definición. Prácticamente no ha cambiado el modelo de finalización con respecto al de hace un mes. A día de hoy, seguimos sin saber si realmente se podrá disputar el Playoff o se producirán ascensos directos".
Las palabras del mandatario del sindicato vienen a raíz de que todavía Sanidad debe dar el visto bueno para el regreso de la competición. Sin él, los ascensos se otorgarían a los primeros de cada grupo. "Hay muchas cosas que están sin definir. Se habla de que comenzarán dos o tres semanas después de que se reinicie la Liga profesional. No sabemos cuándo podrán jugar entonces, ni cuándo podrán volver a entrenar los equipos. Muchos de ellos utilizan instalaciones municipales y quizás no podrían entrenar. También nos preocupa qué protocolo de Sanidad deben seguir, qué costes acarrea el mismo...", relata a este periódico.
"Hay muchas cosas aún por definir"
Otro de los problemas que están sobre la mesa es la prórroga de los contratos. Muchos futbolistas de Segunda B y Tercera finalizan vínculo con su actual club el 30 de junio. A día de hoy se desconoce si para entonces ya se habrán disputado las eliminatorias por el ascenso: "Evidentemente no lo tenían en cuenta en sus presupuestos iniciales. No hay nivel de definición sobre si será viable y si lo fuera, tampoco se conoce quién tendrá que asumir los costes: los clubes, una partida presupuestaria de la Federación...".
Más contratiempos: desescalada, positivos en los equipos...
La diferente evolución de la pandemia bajo nuestras fronteras provoca que las Comunidades Autónomas ganen tiempo al virus a través de las diferentes fases. De este modo, en La Graciosa se rigen por la fase 1, mientras en Madrid se continúa en la 0. Esto también afecta a los entrenamientos deportivos: "Hoy se prorroga el estado de alarma y los equipos profesionales todavía no pueden entrenar con normalidad. A la fase 2, las Comunidades Autónomas podrían llegar de forma desigual. En Tercera, muchos equipos utilizan instalaciones municipales que no van a tener abiertas para entrenar y tendrían que buscar alternativas. Si van a otro sitio y hay que desinfectarlo, si hay que hacer test... ¿Quién asume esos costes? Nos parece difícil que estos Playoff puedan tener lugar".
Una cuestión que se debe abordar es qué sucedería en caso de que un futbolista, más expuesto que los profesionales de Primera y Segunda, diera positivo. David Jiménez da su visión: "Entra dentro de la indefinición que existe. Nadie sabe lo que podría pasar. Los jugadores de Tercera División compaginan la actividad deportiva con la actividad laboral normal. Van a trabajar por las mañanas y por la tarde a entrenar. Ellos están sometidos a riesgo de contagio. A un jugador profesional le hacen hoy un test, a la semana que viene otro, pero él no ha vivido otro contexto laboral. En Tercera uno es informático, otro administrativo... Están expuestos y como ese caso, hay otros muchos indefinidos encima de la mesa".
La remodelación de la categoría
En las últimas semanas, un importante número de clubes han respaldado la creación de una nueva categoría, la Segunda B Pro, que ayude a la profesionalización del fútbol modesto. La RFEF ha confirmado que así será, pero, antes de ello, habrá una temporada de transición, que también ha valorado ProLiga: "Parece claro que la próxima temporada habrá cinco grupos de 20 y nos preocupa si eso afectará al nivel de la categoría. De todos modos no está del todo definido. Se habla de una remodelación de subgrupos, pero tampoco queda claro cómo serán, de cuántos, si eso depende de la Territorial o de la RFEF".
Una vez disputada, la Segunda B no volverá a ser lo que era y es primordial definir con exactitud cada uno de sus puntos. Ante ello, ProLiga reclama estar presente en el debate: "Es algo que hay que estudiar muy despacio, hay que analizarlo bien, hay que conocer bien cómo afecta a todas las categorías, cómo afecta a Tercera. ProLiga tiene que estar presente en las mesas de trabajo que se puedan conformar para poder analizar en contexto de todas las categorías y poder intentar buscar una reestructuración que beneficie a todo el mundo y que no haya perjudicados".
"Los jugadores de Tercera están más expuestos"
Si bien desde hace años se estudiaba cómo darle una vuelta al modelo de Segunda B, la implantación provocará que la próxima temporada descienda de nivel más de la mitad de la categoría. Esto es otro asunto que preocupa a David Jiménez: "Y no solo eso. Habrá cientos de equipos de Tercera que bajen a un quinto nivel. Ahora mismo no es más que una idea que se puede haber lanzado, pero esto exige de un estudio más detallado, de un análisis y de un trabajo más pormenorizado de cómo tienen que quedar. Hay que contar con la opinión de lo que piensan los de Segunda B que podrían estar en una Segunda B normal, qué piensan los equipos de Tercera... Hay que involucrar a ProLiga, crear una mesa de trabajo y trabajar bien".
Acciones jurídicas ante el cambio
ProLiga puede confirmar a este periódico que algunos clubes de la categoría, en defensa de sus intereses, están dispuestos a reclamar sus derechos a través de la vía legal. No todos lo han confirmado oficialmente, cosa que sí ha hecho el Córdoba. David Jiménez explica los motivos a los que se pueden atener: "Cualquier solución salvo terminar las competiciones ni aparece reflejado en el propio reglamento de la federación española ni aparece en las bases de competición. Es decir, todo podría ser recurrible. Cualquiera podría recurrir cualquiera de estas opciones o la solución que ponga la Federación encima de la mesa porque se considere perjudicado".
No obstante, ProLiga como patronal representa a un importante número de equipos y no se ha planteado tomar acciones como sindicato. Es más, habla de una preocupación que afecta a todos por igual: "Estamos muy preocupados por cómo de sostenibles desde el punto de vista económico van a ser los clubes a partir de la temporada que viene. Muchos les han quitado ya los patrocinios. Se está hablando de comenzar la temporada más tarde e incluso a puerta cerrada, lo que implicaría una merma de ingresos muy importantes en muchas cosas. Desde ProLiga publicamos hace poco un decálogo de propuestas que hemos trasladado al CSD, a la Federación, a la Liga y a los sindicatos, que van en esta vía, en la vía de la sostenibilidad económica".
Unos presupuestos inciertos
Falta de patrocinios, desconocimiento de los ingresos por taquilla, remodelación pendiente... La próxima temporada será una tempestad para las entidades más modestas: "Los clubes, prácticamente la mayoría, no saben cómo presupuestar de cara al año que viene. No saben qué ingresos prevén tener por patrocinios, la temporada 20-21. Si ya nos metemos en la 21-22, con una posible reestructuración, lo que podría ser una posible quinta categoría... Es muy importante la parte que le corresponde a la Federación. Ellos dicen que garantizan las ayudas que están comprometidas. Eso es importante que lo recalquen, porque por lo menos los clubes saben qué les puede caer. Hay que tener esas partidas muy claras".
"Los clubes no saben cómo presupuestar"
Por último, y a la espera de saber la fecha en la que se disputará el Playoff, cabe abordar la renovación de los contratos a aquellos que finalicen vínculo el 30 de junio: "Tiene hasta connotaciones jurídicas. Es decir, un jugador que vence contrato laboral el 30 de junio, hay un principio fundamental del trabajo que es la voluntariedad. No puedes obligar a una persona a extender el contrato más allá de lo que tenga firmado. Pasaría por negociaciones con los propios jugadores. Los clubes tendrían que negociar con los jugadores las ampliaciones de esos contratos y eso pasa porque haya una aceptación por ambas partes. Es decir, podría darse el caso que un equipo tuviera a diez jugadores que no quisieran seguir".