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Comunicado de los jugadores del Eibar: "Tenemos miedo"

La plantilla armera ha mostrado su preocupación por la vuelta a los entrenamientos a través de un comunicado. Primer equipo que muestra discrepancias con LaLiga.

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Comunicado de los jugadores del Eibar: "Tenemos miedo"

La plantilla del Eibar teme por su salud y la de sus familias en caso de reanudarse la competición que se paró a mediados de marzo por el coronavirus. Los futbolistas y técnicos del club guipuzcoano de Primera División, mediante un comunicado que desveló el martes la Cadena SER, quieren que se les garantice que no contagiarán a sus allegados si vuelven a la actividad deportiva.

Los jugadores, entrenadores y demás miembros del cuerpo técnico eibarrés ven riesgos con la vuelta a los entrenamientos y a la competición en un deporte en el que hay contacto físico entre los participantes, sean del mismo equipo o del rival. Es imposible mantener la distancia física de seguridad en el terreno de juego y, además, en un partido oficial de fútbol no se pueden usar las protecciones (mascarillas) que se exigen a otros trabajadores para evitar la propagación del COVID-19.

"Tenemos miedo a iniciar una actividad en la que no podremos cumplir la primera recomendación de todos los expertos sanitarios, el distanciamiento físico. Nos inquieta que, por hacer lo que más nos gusta, podamos contagiarnos, infectar a nuestros familiares y amigos, e, incluso, contribuir a un nuevo brote de la epidemia, con las terribles consecuencias que ello conllevaría para toda la población", destacaron.

"Lo primero debe ser la salud de todos, y es el momento de que esa idea prevalezca con hechos, no únicamente con palabras. Sólo con esa premisa clara, tendría sentido volver a la competición. Pedimos garantías. Exigimos responsabilidad", reclamaron.

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"Es cierto que millones de trabajadores han vuelto a sus tareas, con mucha menos atención y muchos menos medios sanitarios que nosotros. Muchos sin unas garantías mínimas. No es justo, y lo sabemos. Somos unos privilegiados", reconocieron.

"Somos unos privilegiados, disfrutamos entrenando y jugando cada minuto; por eso queremos jugar. Pero antes que futbolistas somos personas. Y como gran parte de la sociedad, nos preocupa la situación sanitaria", resaltaron.

En caso de que continúe la liga en la máxima categoría, se hará a puerta cerrada, sin aficionados en las gradas. Y eso tampoco les gusta. Y es que el Eibar-Real Sociedad (1-2) que tuvo lugar en Ipurua el martes 10 de marzo ha pasado a la historia como el primer partido disputado a puerta cerrada en España por el coronavirus. La experiencia, con un estadio vacío y desangelado, en la que imperaba el silencio, fue muy dura para los azulgranas.

"El fútbol nos apasiona y nada nos hace más ilusión que poder volver a reencontrarnos y hacer disfrutar a la gente. Sin el fútbol nos sentimos vacíos, como lamentablemente estarán nuestras gradas. Defendemos un escudo que representa miles de personas, y nada será igual sin ellos. El espectáculo pierde su esencia sin aficionados", afirmaron.

Anteponer la salud a todo lo demás

El plantel del Eibar no lo ve claro, como tampoco otros muchos deportistas que practican un deporte de equipo en el que hay contacto, como el baloncesto, el balonmano, o el rugby. En Holanda y Francia ya se ha suspendido el balompié profesional -Bélgica fue la primera en decir que no se iba a acabar la temporada-, mientras que en España ya se han dado por finalizadas las competiciones de balonmano y rugby de las máximas categorías.

Varios jugadores del Eibar han mostrado en público su preocupación por la posibilidad de contagiarse de la enfermedad en la práctica deportiva en caso de volver a la actividad para reanudarse una liga que se paralizó tras la jornada 27, y a la que le quedan todavía 11 partidos por disputar si se quiere acabar con las 38 jornadas ligueras.

Pape Diop fue muy claro el 16 de abril. "No volvería a jugar si hay riesgo de contagiar a la familia. El fútbol mueve mucho dinero, pero lo más importante es la salud. Me parece muy pronto para salir a entrenar, esta enfermedad es más seria de lo que nos habían dicho", destacó hace dos semanas el centrocampista de Senegal, afincado en su casa del País Vasco.

"Hasta que la salud no esté segura, no me parece bien jugar", dijo José Ángel 'Cote' el 8 de abril. "Lo más justo sería jugar, pero la salud es lo primero. Y en estos momentos la salud no está garantizada. Hasta que no esté segura la salud, no me parecería bien reanudar la competición", resaltó el defensa lateral izquierdo asturiano. "No pienso mucho en el fútbol con todo lo que está pasando ahí fuera. Toda la humanidad debe centrarse en parar el virus", sentenció el gijonés.

Ni siquiera el hecho de que se haya planificado el comenzar a entrenarse primero individualmente y, luego, en grupos pequeños -como ocurrió en Alemania-, le convencen a Cote. "Me parece una tontería. No creo que soluciones nada con eso. Lo más importante es la salud en estos momentos", aseguró hace cuatro semanas. Sus palabras resultaron proféticas, porque en Alemania ya hay 10 futbolistas contagiados antes de empezar la competición, y algunos son del mismo equipo. Y es que el coronavirus es una enfermedad contagiosa que lo mismo se puede transmitir entre compañeros de trabajo o de actividad deportiva, si comparten un espacio cercano o si mantienen un contacto físico.

Sebastián Cristóforo también desveló su intranquilidad por el mismo asunto el 2 de abril. "Antes de hablar de terminar la liga, debe acabar esta pesadilla del virus. Lo primordial es intentar encontrar una cura para el virus, que no haya más contagiados y volver a la vida normal. Después ya se verá cómo se reanuda todo: la liga, la vida, los trabajos, los estudios, etcétera. Pero lo esencial en estos momentos es intentar parar el contagio. Lo principal es la salud de las personas", señaló con rotundidad. "Estamos viendo que es una crisis mundial, no solo de un país. Esperemos que dentro de poco se sepa cómo se puede no propagar más esta enfermedad contagiosa y encontrar la cura. Tenemos que intentar disminuir el contagio entre todos, estando en nuestras casas; que esto termine lo antes posible y volvamos a recuperar nuestras vidas", indicó hace más de un mes.

"Queremos jugar, pero no a cualquier precio"

"Queremos jugar, pero no a cualquier precio. Primero debemos preservar la salud de todos los protagonistas", destacó el sábado pasado Amaia Gorostiza, presidenta del Eibar, respecto a la reanudación de la liga. "Sabemos que no reanudar la competición acarrearía unas consecuencias bastante importantes tanto económicas como sociales; y es por ello que estamos trabajando para volver a la competición. Nosotros queremos jugar, todos queremos jugar, pero no a cualquier precio. Evidentemente, queremos preservar la salud de todas aquellas personas que están dentro de la propia competición", subrayó la presidenta azulgrana. "Los futbolistas desean jugar, pero temen por su salud y por la salud de sus familias, lógicamente", resaltó Amaia Gorostiza.

"Lo primero es la salud de las personas que participan en un partido", destacó el 4 de abril Jon Ander Ulazia, consejero delegado del Eibar, quien hace un mes hizo una valoración sobre los tres supuestos que se manejaban (que no se reanudara la liga, que se hiciera a puerta cerrada, o con público). Ahora, sólo se piensa en acabar la competición sin espectadores en las gradas. "Hay que planificar todos los posibles escenarios, poniendo la salud de los futbolistas y de todos los que participan en el terreno de juego por delante. La Liga (dijo refiriéndose a la patronal de clubes) ha dejado claro que no va a haber ningún tipo de reanudación si no se garantiza la salud", indicó.

Los futbolistas y técnicos del Eibar piden ahora, un mes después, que se cumpla con lo prometido hace un mes, que se garantice la salud de los deportistas. Y si eso es imposible, entonces no se puede competir en un deporte con contacto físico como el fútbol. Porque los futbolistas profesionales son personas que se pueden contagiar como el resto de trabajadores si no se toman las medidas oportunas de prevención de riesgos laborales.