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TAL DÍA COMO HOY

Piqué pone en pie a la Caja Mágica

Estamos confinados, pero vamos a conducir un Delorean y, en un regreso al presente, imaginaremos lo que pasaría tal día como hoy. Cualquier parecido con la realidad es casual.

Actualizado a
Gerard Piqué comenta algo con Albert Costa, durante uno de los partidos disputados en la Caja Mágica de Madrid.
CHEMA DIAZDIARIO AS

Atracción. Comenzó ayer en la Caja Mágica el Madrid Open de Tenis con el acostumbrado éxito de público en la zona de restauración, donde no cabía un alfiler. Se sospecha, tal y como pasa en el Torneo Conde de Godó y en cualquier sarao de estos que se precie, que ahí habita gente que ha comido más croquetas que puntos ha ganado Rafa Nadal a lo largo de su carrera. De nuevo, en la primera jornada, la gran sensación de la jornada fue la presencia de Gerard Piqué, que se pasó por ahí para seguir haciendo lo suyo. Esto es, hacer negocios mientras va jugando con el Barça. Se agradeció la presencia del creador de la nueva Copa Davis, porque esa circunstancia congregó gente en la pista. Llegaron, le insultaron, le gritaron "yo soy español", y luego volvieron al gañote. "Siempre me he sentido muy bien recibido en Madrid; es más, de cara al año que viene estamos pensando en ampliar la oferta de la Davis para hacerla coincidir con la Pasarela Cibeles. Hay que ver lo que se arregla la gente aquí en Madrid para ir al tenis", declaró camino de su jet privado para llegar a tiempo al partido de su equipo en Villarreal en el que se jugaba el título.

Valentino revival. Valentino Rossi volvió al Circuito de Jerez para disputar el Gran Premio de España de la categoría MotoGP como el caballero que se fue a las Cruzadas y regresa a su casa. Il Dottore ganó su primera carrera en el trazado andaluz en 1997. Por aquel entonces, al Real Madrid lo entrenaba Fabio Capello; Chendo aún formaba parte de la plantilla, y Secretário había llegado al Bernabéu tras dura pugna con el Barça. Barbie Girl, del grupo Aqua, arrasaba en las listas de discos (sí, discos) más vendidos (sí, vendidos en tiendas además), se acababa de estrenar Titanic y aún nadie sospechaba que en la tabla había sitio para Leonardo di Caprio. Diana de Gales se acababa de liar con Dodi Al Fayed y en Escocia nacía, o al algo así, una oveja a la que le pusieron Dolly de nombre. Un respeto a Valentino.

Estambul de oro. Mañana martes y el miércoles se conocerán los finalistas de la Champions League después de jugarse la vuelta de las semifinales. En previsión de la llegada de las aficiones rivales, la ciudad turca ya está preparada para el acontecimiento. El Gran Bazar ya cobra precios de Tiffany & Co. por un collar hecho de macarrones. Una habitación para quince en una pensión con derecho a lavabo comunitario está a 800 euros noche y en el aeropuerto de la ciudad ya sólo pueden aterrizar jets privados.

Craviotto es abanderado. El pasado miércoles se confirmó por parte del COE que Saúl Craviotto será el abanderado español para los Juegos Olímpicos de Tokio. Decisión celebrada por los aficionados y la prensa, que sigue con fruición el piragüismo. Con cuatro medallas olímpicas, diez en campeonatos del mundo y seis en los europeos, en España todo el mundo le conoce.