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SEVILLA

Monchi: 20 años, 20 fichajes

Ramón Rodríguez Verdejo 'Monchi' (San Fernando, Cádiz, 1968) cumple dos décadas como director deportivo-Rey Midas del Sevilla, con el paréntesis de la Roma.

Monchi, en el Ramón Sánchez Pizjuán.
MIGUEL MORENATTIDiario AS

A finales de abril de 2000 Roberto Alés, presidente del Sevilla, encargaba la parcela de fichajes a Ramón Rodríguez Verdejo, portero que había sido y delegado que era en ese momento del club de Nervión. "No había ni para balones", había dicho Alés de aquellos duros momentos en la historia blanquirroja, camino de Segunda División esa misma temporada. Pero la magia del director deportivo le dio la vuelta a la historia del Sevilla. Estos son 20 de sus mejores, más rentables y significativos fichajes en el Sánchez Pizjuán.

David Castedo. Este menudo lateral izquierdo llegó en verano de 2000, libre, desconocido y con su 1,61 de altura desde Mallorca. Creció con el Sevilla europeo hasta la capitanía y los primeros títulos. Es el arquetipo de rendimiento durante la era Monchi: desconocido, comprometido y muy ganador.

Gerardo Torrado. El pivote mexicano costó en 2001 60.000 euros, procedente del Poli Ejido. Aportó repercusión internacional y carácter. Después jugaría tres Mundiales.

Dani Alves. Sus desordenadas primeras carreras por la banda, en 2002, causaron estupor en el Pizjuán. Llegó cedido por el Bahía brasileño en verano de 2002 y fue adquirido por 550.000 euros en enero de 2003. En 2008, el mejor lateral derecho del siglo XXI y jugador con más títulos era vendido al Barcelona por 45 millones.

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Julio Baptista. Monchi le fichó como pivote defensivo del Sao Paulo en verano de 2003, a cambio de 3,5 millones. Caparrós le reconvirtió en segundo delantero y, cincuenta goles y dos campañas después, la Bestia acabó en el Real Madrid multiplicando su valor hasta los 20 millones de euros.

Adriano Correia. Un Dani Alves de la banda izquierda y con un éxito menor, que no poco, en enero de 2005. Este ambidextro llegó del Coritiba por dos millones. Cuatro años y medio y varios títulos después se marchaba también al Camp Nou mutiplicando su precio por cinco.

Kanouté. "Oh Kanouté, amigo Kanouté", compuso El Arrebato para la despedida del que muchos consideran mejor delantero en la historia del Sevilla. Ningún extranjero marcó tantos goles como los 136 que hizo el maliense de 2005 a 2012. Llegó del Tottenham a cambio de 6,5 millones y muchos decían que no veía puerta...

Luis Fabiano. La pareja de Frederic, apodado con guasa en sus primeros malos meses como 'Luis Fallamos'. Lo cedió el Oporto y el Sevilla lo compraría después por 10 millones. Para muchos, el mejor Matador en sevillista.

Poulsen. Primer rubio maravilloso llegado del Schalke a Nervión, libre, en el verano de 2006. Equilibrio danés para el pivote, la Juve lo compró en 2008 por 10 millones.

Seydou Keita. Más estabilidad para el mediocampo y negocio redondo de 2007 a 2008. Llegó del Lens por 4 millones y un año después se marchó al Barcelona por 14.

Fernando Navarro. Compromiso y polivalencia por la zurda, fichó por 4,7 millones del Mallorca en 2008 y levantó la Europa League como capitán en 2015. Ahora ayuda a Monchi en la dirección deportiva.

Ivan Rakitic. Una de esas oportunidades de mercado en enero de 2011, por 1,5 millones y del Schalke, donde quedaba libre. Dejó huella en el barrio de Pino Montano (de allí es su mujer) antes de irse al Camp Nou en 2014, por 18 millones. Volverá.

Coke. Otro de esos futbolistas que convierten las plantillas en un equipo. Costó 1,2 millones del Rayo, en verano de 2011, y se marchó en 2016 (al Schalke, vaya trasvase) por 4 millones y tras hacer dos goles al Liverpool para la 5ª Europa League.

Kondogbia. El ahora valencianista es otro de esos casos de máxima rentabilidad. Fichado con 19 años, por 4 milllones, y camino de Mónaco sólo un año después al pagar su cláusula de 20.

Bacca. ¿Cómo traer a un delantero de 27 años y de Bélgica, por muchos goles que hiciera allí? Lo hizo Monchi en 2013 y le sacó 49 tantos antes de venderle al Milán en 2015 por 30 millones.

Vitolo. La magia también llegó desde Segunda, de Las Palmas. 3 millones costó hasta alcanzar la internacionalidad y los 36 que pagó el Atlético por este extremo canario, que se fue cuando no estaba Monchi, por cierto.

Krychowiak. Uno de esos futbolistas que han rendido en Nervión como en ningún otro sitio. Potentísimo pivote polaco comprado al Reims por 5,5 millones en 2015 y vendido al PSG por 28.

Banega. Su carrera se estancaba en Valencia tras varios errores extradeportivos y Monchi apostó por él en 2014, por 2,5 millones que hoy suenan a risa. Ha gobernado el centro del campo sevillista en dos etapas con un impasse en el Inter.

Ben Yedder. 9,5 millones de euros costó del Toulouse en 2016 y por 40 se fue al Mónaco el verano pasado. El delantero franco-tunecino casi nunca convenció pero siempre goleó, efectividad marca Monchi. Hoy vale más aún.

Pablo Sarabia. El descenso del Getafe en 2016 se lo puso en bandeja a Monchi por unos 400.000 euros. Su rendimiento en goles y asistencias (70 en tres campañas) hizo que los 20 millones que el PSG pagó por su cláusula parezcan muy pocos.

Ocampos. Uno de los últimos milagros del Rey Midas del fútbol. Llegado de su Potosí, el mercado francés, por el extremo argentino se pagaron 15 millones al Marsella el pasado verano y ya está tasado en al menos cuatro veces más.