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CONECTAD@S EN AS

"Llevan confinados 40 días y no quieren confinarse más"

Conectad@s de As reunió telemáticamente a José Luis de Santos, presidente de la ACP, y David Aganzo, presidente de la AFE, que anuncia que los jugadores no quieren concentrarse y que "no tenemos prisa" por volver.

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David Aganzo (10-1-1981) y José Luis de Santos (12-2-1968) son los presidentes de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) y de la Asociación de Ciclistas Profesionales (ACP), respectivamente. Telemáticamente, sus rostros también expresan fatiga y estrés. A Aganzo le acompaña un fondo neutro que implica imparcialidad. De Santos, sin embargo, tiene un conmovedor cuadro a su espalda. Tira de la maglia rosa del Giro, un tal Miguel Indurain, en una etapa de la edición de 1993. Todo pasión. "La gente se identifica con el ciclista", reivindica. Conectad@s de As reunió a Aganzo y De Santos para ponerse en el prisma de los protagonistas de esta industria. La tertulia, introducida por el director de As, Vicente Jiménez, y en la que también participa el subdirector, Juan Gutiérrez, se prolonga durante tres cuartos de hora. Y empieza con ritmo. Hablando de garantías. "Somos deportistas, pero también trabajadores y personas. Y, como trabajadores, pedimos seguridad e intentamos que las autoridades sanitarias den el visto bueno a estos procesos", explica Aganzo cuando se le pregunta si, para volver a jugar, los futbolistas han exigido un justificante firmado por el Gobierno haciéndose responsable de lo que ocurra.

A De Santos y Aganzo no les gusta nadan los clichés fáciles que están rodeando en este tiempo a los deportistas de élite. "La gente a veces puede pensar que vamos rodando por la carretera por una pura cuestión de ocio... No hay deportista que quiera más a su deporte que el ciclista. Trabajamos 24 horas al día: entrenamiento, alimentación, descanso... El ciclista es tan feliz haciendo su trabajo que sacrificaríamos las vacaciones este año", anuncia De Santos. Mientras, Aganzo también lamenta las etiquetas: "Nos hemos sentido estigmatizados. Por ejemplo, en los ERTES. A la una o dos semanas de la declaración del estado de alarma, los clubes ya estaban haciendo ERTES cuando tienen un presupuesto, un control económico y unos ingresos que estaban cumplidos hasta mayo. Y en diferentes medios se insiste en que los futbolistas son millonarios y tienen que hacerse cargo de estas reducciones, cuando muchos de ellos lo único que hacen es ayudar y donar de manera privada. Y ahora, los tets. Decir que los futbolistas tienen tets porque que son millonarios... Sólo piden respeto y, al Ministerio de Sanidad y al CSD, que les digan si esos tests son para ellos. Si no hay contestación y si LaLiga puede hacer esos tests, pues nos haremos los tests para ponernos en marcha sin ningún tipo de riesgo de contagio y que salgamos".

Hay tres grandes inputs que preocupan a los futbolistas si la maquinaria vuelve a arrancar para que haya fútbol: los tests, las concentraciones y las lesiones. Los analiza, punto por punto, el presidente de la AFE: "Ahora mismo lo que inquieta es la salud, eso es lo primordial. Debe haber un plan de prevención riesgos laborales. Debe certificarse que los deportistas pasen unos tests para saber si están bien. Luego están las lesiones, que también son salud. El calendario será apretado; junio y julio son meses de calor; y habrá que cuidar los horarios, habrá que hidratarnos. Pero entre todos deberamos unirnos y estar de acuerdo. Y respecto al confinamiento, los jugadores llevan más de 40 días confinados y no entienden confinarse otra vez. Por un tema físico y por un tema psicológico".

La pasada semana, Andreas Zagklis, secretario general de la FIBA, consideraba en As que el gran desafío del deporte estos meses era adaptarse hasta la aparición de la vacuna. Nadie ve sencilla esa transición. Cada uno, por sus razones. Aganzo explica las de los futbolistas: "Las fases uno (entrenamientos en solitario) y dos (adaptación) son posibles. Pero nos encontramos una fase tres y una fase cuatro en las que son necesarias un distanciamiento social. Y los futbolistas no cumplimos el distancimiento social. Alguien que trabaja en una oficina puede estar dos, tres o cuatro metros separado de su compañero. El futbolista no puede cumplir esa pauta. Tenemos que competir y en el fútbol, al final, hay que estar en contacto. No podemos permitirnos la distancia de seguridad".

De Santos también lo ve difícil: "No soy muy optimista porque, si no hay una vacuna o un medicamento que pueda controlar la enfermedad, va a ser difícil. ¿Qué vamos a hacer, un Tour sin público? Y si lo hay, ¿cómo vas a controlarlo? Va a ser un año muy difícil para todos los deportes. Ojalá tengamos esa vacuna o ese medicamento para hacer las cosas bien. Si no, tendremos miedo. Qué pasa si vamos al Tour o va algún corredor y da positivo. ¿Van a estar encerrados en un hotel 15 días? Esperemos que podamos competir con la mayor normalidad".

También hay reproches. A Aganzo se le hace muy difícil entender cómo el Gobierno no llamó al sindicato en la reunión secreta de Viana: "No hemos tenido ninguna reunión con el Gobierno. Estamos intentando que nos contesten a dudas que estamos teniendo. Los futbolistas no estuvimos convocados en la reunión. Sí nos preocupa porque los futbolistas somos una parte esencial; sin futbolistas no hay fútbol y si nos duele que no se nos convoque a estos actos. El Ministerio de Sanidad debe garantizar la salud de lo deportistas".

Aganzo y De Santos sí difieren en un detalle. Los tiempos. El presidente de los ciclistas admiten que "los ciclistas tienen prisa por salir a la carretera, porque se ha fijado un calendario y necesitamos un mes y medio o dos meses para estar listos. Los jugadores piden salir a la carretera ya, y más si otros países están saliendo. No estamos en las mismas condiciones de otra gente y necesitamos salir para poder competir". Eso sí, De Santos deja claro que habla de entrenarse a nivel individual, "porque pasaremosa metro y medio de los coches y no hay riesgo de contagio". En las carreras será otra cosa: "Hay que estar muy encima y puede pasar. Por eso yo no veo cercana la competición hasta que tengamos la vacuna o medicamento que cure la enfermedad". Aganzo deja muy claro que en la AFE "no tenemos prisa; ya hemos cancelado cuatro o cinco calendarios y sólo sabemos que hay una fecha, el 31 de julio, como fecha límite para que acaben las competiciones". "Un deporte tiene que estar para vivir, no para matar. El balón tiene que dar felicidad a todos. Hay que ser precavidos. No que el balón se use como arma para matar a personas".

De Santos pasa revista a la situación del ciclismo español. Asegura que no es crítica, pero desliza que sería grave en caso de que no puedan correrse las tres grandes: "Los corredores españoles corren en equipos y patrocinios con alma ciclista y en los equipos profesionales no habría esos problemas. Movistar está con fuerza y tiene tradición; Caja Rural y Euskaltel, igual; y el Burgos BH tiene detrás también al Ayuntamiento y la Diputación de Burgos. Pero creo que al nivel de World Tour sería caótico y perderíamos muchos puestos de trabajo. Quitando la Vuelta a España, el resto de las carreras en España son carreras que dependen de subvenciones públicas. Y a ver cómo se levantan estas carreras como va a quedar el país: Vuelta a Andalucía, Volta a Catalunya , Vuelta a Murcia, a Mallorca...".

Aganzo quiere acordarse de todas las categorías: "Llevamos reuniéndonos con todos los capitanes de Primera y Segunda, también con todos los de Segunda División B, de Tercera, y hemos hablado con nuestras compañeras del Reto y de la Liga Iberdrola. Nos interesa el feedback que nos dan. Ellas y ellos son nuestros jefes y vamos a acatar lo que digan nuestros jugadores y los vamos a apoyar a muerte. Estamos cerca de los compañeros".

No hay fecha de regreso. Pero sí esperanza. Los futbolistas calculan 30 días para ponerse en forma cuando trabajen en equipo ("hay un riesgo máximo y hay que manejar con los doctores y los preparadores físicos de cada club para que nuestros compañeros estén en condiciones óptimas. Los jugadores no están parados como puedan estar en vacaciones pero no tienen dónde hacer cambios de juego, chuts, golpeos de 20 y 30 metros"; los ciclistas, "mes y medio o dos meses" y una carrera de diez días antes del Tour, ese 'El Dorado' con el que sueñan. "Con los corredores que más hablo son Mikel Landa, Omar Fraile, Peio Bilbao. El primer mes estaban más tranquilos pero ahora quieren salir a la carretera para ejercer su profesión", admite De Santos.

Conectad@s son 45 minutos de reflexiones. De muchas incertidumbres, por supuesto. Pero también de esperanza. "El deportista es un espejo de la sociedad por la superación. Vamos a salir reforzados de la pandemia". Viendo esa imagen imperial del Indurain del 93, patrón del ciclismo en aquel momento, uno se ve capaz de todo.