Las Palmas
Cuando más es menos para la Unión Deportiva
Las Palmas es el 6º equipo más rematador, pero sus guarismos ofensivos son de los peores. Jonathan Viera y Pedri también lideran aquí al equipo amarillo.
Era la UD un equipo de capa caída antes del confinamiento por culpa del coronavirus, 11 jornadas sin ganar y mínimas esperanza a corto plazo de invertir semejante racha negativa. En su juego, además, reinaba la contradicción. Las estadísticas, algunas intrascendentes si no ejecutan de manera correcta las acciones computadas, le daban la espalda.
El equipo de Pepe Mel, por ejemplo, acumulaba antes del parón más porcentaje de posesión, 57,21%, que cualquier otro equipo de Segunda División. Era, además, el conjunto que más más pases buenos dio, 5.875, en campo rival, acaso avivando añejos debates sobre la forma más conveniente de jugar en Segunda División. Su importante presencia en campo rival pecaba de un juego en exceso horizontal, rozando en muchos casos la monotonía, en cualquier caso facilitando sobremanera la estrategia defensiva del rival.
Rivales cuyos porteros, además, tampoco es que tuvieran que estar en exceso preocupados. Ocurre que Las Palmas, antes del cierre, remató 131 veces a la portería contraria, el 6º equipo en dicha clasificación, únicamente ocho artilleros para 34 goles, el 14º equipo de la categoría, a años luz de los 51 de la UD Almería. La producción ofensiva amarilla otra vez en evidencia, apenas optimizando sus ataques.
En picado.
La peligrosidad ofensiva de la Unión Deportiva cayó en picado, como tantas cosas, cuando se confirmó el regreso de Jonathan Viera al Beijing Guoan. Ocurre que el mediapunta grancanario, que antes del parón ya llevaba dos meses y medio fuera del equipo, se mantiene como su máximo goleador, con 10 (casi un tercio), por supuesto también como el máximo rematador, con 23 tiros, de cara a la portería rival. Le secundan Pedri (13) y Narváez (12).
No supo Las Palmas optimizar sus remates a portería, y fueron muchos los que tuvo. Y es que a veces, más es menos.