El Alavés pleiteará con Fuchs por su espantada del Maccabi Haifa
El centrocampista franco-camerunés estaba cedido en Israel por los vitorianos y se saltó el compromiso a tres bandas al dejar el equipo.
Una de las cosas de las que habló en su día el director deportivo del Alavés, Sergio Fernández, es de que "algunos jugadores que pertenecen a nuestro club están aquí por la herencia del convenio que teníamos en su día con el Sochaux". Se refería a Páez, Rafa Navarro o a los franceses Verdon y Fuchs". La mayoría de ellos han encontrado acomodo como cedidos pero el último dejó Haifa por decisión propia ya que no gozaba de los minutos que él deseaba en Israel. Lo hizo antes de las navidades y regresó a Francia, no a Vitoria.
Se trata de un menudo centrocampista nacido en Yaoundé (Camerún) y que tiene 22 años. Como emigró al país galo de joven, y tiene relativamente buen nivel, fue internacional en las categorías inferiores de los combinados franceses, aunque ahora mismo juega con la absoluta de su país de origen. Tiene una cláusula cercana a los 40 millones de euros y su sueldo se acerca a los 400.000. Es muy difícil, por lo tanto, colocarle.
Fuchs fue uno de los pocos jugadores que llegaron a prueba en la pretemporada de la 2019-20 y que se presentaron oficialmente. Otros futbolistas como Miérez o Verdon, sin ir más lejos, no pasaron siquiera por la sala de prensa de Mendizorroza o de Ibaia. Pero no convenció a Asier Garitano en las primeras semanas y tuvo que hacer las maletas rumbo a Israel. El Maccabi Haifa se hizo con sus servicios en ese mercado.
Tiene contrato hasta 2023 por lo que, si el Alavés quiere quitárselo de encima, tendrá que llegar a un acuerdo con BS Group-BS Law, agencia que le representa ahora mismo. O no... porque el club vitoriano ha explorado la opción de denunciar al futbolista por romper de forma unilateral un compromiso a tres bandas entre los dos clubes y él mismo. Si las autoridades deportivas le dan la razón a la entidad albiazul, Sergio Fernández se quitará un buen peso de encima. Hace tres meses estuvo a punto de marcharse a Estados Unidos pero su alta ficha volvió a complicar las negociaciones.
El jugador, hombre intenso en el centro del campo a pesar de su baja estatura, está pasando el confinamiento del Covid-19 en Francia. También hubo intereses para reclutarlo procedentes de ese país pero no cuajaron por la misma causa. Los convenios albiazules con Sochaux (Francia), Hércules (Finlandia) o NK Rudeš (Croacia) no cuajaron. En el caso del Istra 1961 dálmata, sin embargo, el Alavés sí hizo una fuerte inversión y compró el 85 % de las acciones. El 15 % restante pertenecen al ayuntamiento de esta ciudad croata con grandes vestigios del Imperio Romano. Desde esa atalaya se extiende una red de ojeadores que baten el futbol balcánico y el de otros países cercanos como Rumanía o Hungría.