Piqué deja claro que no se cree la versión de Bartomeu
El capitán responde en las Redes la versión oficial del club y deja al presidente muy tocado. Si se producen dimisiones, el adelanto electoral será inevitable.
Pasaban 18 minutos de la medianoche del martes cuando Gerard Piqué escenificó públicamente que las explicaciones que había dado esa misma tarde el presidente del club, Josep Maria Bartomeu, a los capitanes y al entrenador del equipo no habían convencido lo más mínimo al vestuario respecto a la crisis generada por la contratación de la empresa I3 Venture. Esa empresa a cambio de un millón de euros además de monitorizar las Redes Sociales que hacían referencia a la entidad, creó cuentas para atacar entre otros al propio Piqué y a Leo Messi, tal y como demostró la Cadena SER.
Con el apoyo de la plantilla en cuestión, Bartomeu se enfrenta ahora a una situación más que delicada. El viernes está convocada una reunión de la junta directiva que se prevé muy complicada. Muchos de los miembros de la junta están muy enojados porque todo este lío se montó de espaldas a ellos y se enteraron por la prensa.
El motivo de esta opacidad es que el contrato con la empresa I3 Venture por valor de un millón se fracciono en facturas de 200.000 euros que se asignaron a diversos departamentos para que no pasaran por junta. Cualquier contrato que supere esta cantidad debe pasar por la aprobación de la junta por mandato estatutario.
Que los pesos pesados del equipo no se creyeron la versión del presidente se escenificó en cuanto Piqué respondió públicamente por Twitter a un periodista que secundaba la versión que horas antes había ofrecido el presidente en la Ciudad Deportiva de Sant Joan Despí a los cuatro capitanes del equipo con el técnico Quique Setién como testigo después del entrenamiento.
El periodista, Marçal Lorente, escribió en su cuenta: "Hace muchos años que conozco el entorno del Barça y la idiosincrasia del socio/a culé y afortunadamente cada vez es menos manipulable y más inteligente y sabe identificar perfectamente quién quiere llegar al Barça para utilizarlo por sus intereses mediáticos, políticos y económicos". Un mensaje idéntico al que Bartomeu había trasladado a la plantilla.
La respuesta de Piqué a este mensaje fue demoledora: "titella" (títere). Quedaba clarísimo que, tal y como informó este diario, que Bartomeu había cerrado en falso la crisis ante los futbolistas.
Durante treinta minutos, Bartomeu se esforzó por exponer sus argumentos y aclarar algunas de las dudas que tenían los implicados sobre este espinoso asunto. Más o menos la línea por la que se condujo Bartomeu fue la misma que expresó al mediodía en el acto de entrega del premio Vázquez Montalbán a Jorge Valdano sin admitir preguntas; es decir, que en el club no tenían conocimiento de que la empresa en cuestión manejaba esas cuentas y que de haberlo sabido hubieran rescindido inmediatamente su contrato, como así han hecho una vez contrastadas las pruebas aportadas por la cadena SER, que destapó en exclusiva esta información.
De hecho, y para acompañar sus argumentos, Bartomeu entregó a los jugadores un dossier completo respecto a los mensajes positivos realizados a través de esas cuentas para apoyar a la entidad catalana y posicionarla positivamente en las redes sociales.
Pero el presidente blaugrana dirigió también sus dardos hacia los medios de comunicación y agentes externos que buscan desestabilizar el club a cualquier precio porque, según Bartomeu, "ya llevamos un año en campaña electoral".
Un argumento que, por lo menos Piqué, no ha comprado (hay que recordar que el central era uno de los atacados por las cuentas en cuestión) y ahora Bartomeu depende de que la junta del viernes cierre filas en torno suyo.
Si se producen dimisiones, a Bartomeu no le va a quedar otra salida que convocar elecciones.