El tridente de la Champions
Zidane apostó por Bale, Benzema y Hazard en la vuelta del belga; ya había dado muestras de que ese tridente era su idea principal para el once tipo.
Para Zidane, Rodrygo es centrocampista, Lucas Vázquez un actor secundario y Vinicius no tiene gol. Por eso Bale sigue siendo importante para él e insiste en recuperarlo. El técnico francés quiere su propio tridente, como Klopp tiene el suyo con Mané, Firmino y Salah, uno como el del Barça con Messi, Luis Suárez y Griezmann o como el de Tuchel con Mbappé, Icardi y Neymar. Como el que tuvo Ancelotti (Bale, Benzema y Cristiano), la BBC que era “innegociable” para el italiano y que luego heredó él mismo. Pero en aquel equipo heredado por Zidane estaba Cristiano, el hombre de los 450 goles en 438 partidos, y terminó prescindiendo de Bale en el once inicial de sus últimas dos Champions ganadas.
Ahora el portugués ya no está. Y con él se fue el gol. El máximo anotador de este Madrid es Benzema (18). Y tras él, Ramos (7). En la temporada del doblete (16-17) el Madrid de Zidane promedió 2,8 goles por encuentro. En esta hace uno menos por partido. Por eso, con la vuelta de Hazard ha vuelto también el tridente al Madrid, y con el belga se ha instalado en la titularidad Bale, el futbolista con más colmillo para el gol de la plantilla. Tras la BBC llega la BBH. Sólo un par de despistes en defensa hicieron que la apuesta terminara en naufragio.
Que Zidane barruntaba un Madrid con la BBH para las grandes ocasiones lo demuestra el hecho de que fuera su apuesta para el primer gran partido de la temporada, ante el PSG en el Parque de los Príncipes. Pero fue demasiado ambicioso y colocó a James junto a Casemiro y Kroos. Cayó 3-0 con estrépito. Y, aún así, Zidane calcó el mismo once en el siguiente partido, en todo un Sánchez Pizjuán (0-1 esta vez). Repitió tridente el técnico ante el Atlético en Liga (0-0), otro partido grande. Esta vez con Casemiro-Valverde-Kroos. Y funcionó... Hasta ayer, por las lesiones encadenadas por Bale y Hazard, no había podido repetir el experimento.
Sobre el campo. Bale se fue aplaudido del Bernabéu sin hacer un partido importante. La afición premió más su esfuerzo que su acierto, que se le viera hacer una cobertura a Carvajal en el minuto 78 o que no dudara en jugarse la expulsión para cortar una contra con una falta dura a Rafinha por detrás. Hazard pesó más por su banda aún que el galés. Formó un triángulo mágico con Marcelo (¡le dio 13 pases!) y Benzema (7). En el horizonte está el Clásico y el City... Sólo resta ver si Zidane quiere de verdad su propio tridente. Pero apunta a la Champions.