MIRANDÉS
Los enemigos en casa
Merquelanz y Guridi están realizando una fantástica temporada, cedidos en el Mirandés. El jueves se enfrentarán al club que les vio crecer como futbolistas.
Especial y emotivo son calificativos que definen a la perfección lo que en estos momentos sienten tres jugadores del Mirandés, que se encuentran cedidos en el club rojillo por parte de la Real Sociedad: Martín Merquelanz, Jon Guridi y Modibo Sagnan. No habrá cláusula del miedo, aunque solo dos podrán ser de la partida en el Reale Stadium ya que el central francés se encuentra lesionado. “Es un partido bonito, pero no deja de ser una eliminatoria a vida o muerte y este año nos toca defender la camiseta del Mirandés. Se prevé que Anoeta esté lleno. He visto varios partidos allí y el ambiente es espectacular. Tocará que les animen a ellos, pero hay que pasar por todo. Intentaremos disfrutar del momento”, apunta el extremo irundarra.
El conjunto de Andoni Iraola pasó malos momentos en las dos primeras eliminatorias antes clubes de Segunda B, pero después eliminaron en Anduva a Celta, Sevilla y Villarreal con un fútbol de otra categoría. Ahora la historia será bien diferente puesto que las semifinales se disputan a doble duelo. “El partido en Anoeta será complicado, pero debemos salir con la idea de ganar. Estrenaremos el nuevo Anoeta jugando con el Mirandés. El destino ha querido que sea así. La eliminatoria pasa porque en la ida saquemos un buen resultado para luego en Anduva acabar la faena. Me mandaron unos datos con los goles que hemos metido fuera de casa y la verdad es que hemos marcado bastantes. Es la línea a seguir”, destacan ambos jugadores.
Lesiones de gravedad lastraron su carrera deportiva como blanquiazules. Ahora han vuelto a recuperar la sonrisa en el Mirandés donde están realizando una gran temporada. “Estamos cedidos. Mi idea es volver a San Sebastián y luego ya se verá lo que hay. Hay mucha gente en mi puesto y quizá no tenga minutos y tenga que salir. Ya se verá”, destaca el centrocampista de Azpeitia, mientras que a Merquelanz no le quita el sueño su futuro: “Me queda un año más de contrato. El fútbol da muchas vueltas y a día de hoy no estoy preocupado”.
Nadie duda de su profesionalidad sobre el césped. En la actualidad defienden los colores del equipo rojillo y también sueñan, como toda una ciudad, en disputar la final de la Copa del Rey: “Ambos lo daremos todo porque al final somos profesionales. El que dude de nosotros, flaco favor nos hace. Los primeros perjudicados bajando el pistón seríamos nosotros. Ser protagonista o no es lo que menos me importa. Quiero que el Mirandés pase la eliminatoria. Al final te enfrentas a compañeros con los que has pasado muchos años, pero un deportista está preparado para este tipo de situaciones”, apuntan al unísono.
Largas colas y hasta cuatro horas de espera para conseguir una entrada en la sede del club. La afición rojilla vuelve a responder y tratará de llevar en volandas a sus jugadores pese a que estarán en minoría en el feudo donostiarra: “Se nos acaban los adjetivos para describir a la afición. No nos quedan palabras. Todos los partidos en casa están de nuestro lado. Estamos a gusto con ellos y el otro día en Gijón no esperábamos tanta gente. Se nota su apoyo y se agradece. Es un orgullo que nos acompañen a muchos sitios. Que vayan a Anoeta quiere decir mucho para el club y la ciudad. Es una semifinal de la Copa del Rey.