"Si pudiera tachar a alguien del Atlético sería a Thomas"
El mediocentro del Eibar repasa con AS su carrera, desde su pueblo Cubelles, pasando por el Damm y el Depor. "Quiero crecer y la mejor manera era venir aquí", sostiene.
Vuelve la Liga, ¿la prioridad en el Eibar?
Sí, intentaremos sumar más puntos que en la primera vuelta (19) porque a ese ritmo no nos va a dar para la permanencia. Los de abajo aprietan fuerte y queremos estar tranquilos.
Ha habido el paréntesis de la Copa. ¡Vaya situación para Delgado con el gol en propia puerta en el descuento!
Queríamos pasar de ronda, pero después de los méritos que contrajo un equipo como el Cacereño de Tercera contra uno de Primera... se le veía hundido al chico, le consolamos diciendo que es una acción más del fútbol, un infortunio.
¿La Copa les distrae o les ilusiona?
Nuestra prioridad es la Liga, la salvación, pero la Copa nos ilusiona, nos gusta y es buena para nosotros.
Le costó convencer a Mendilibar.
Estuve cinco o seis semanas que no conté para el míster. El equipo estaba ganando. Ahora trabajo para estar ahí.
¿Qué le aporta el técnico?
La garra. Cada entrenamiento es al máximo, aquí no se para ni para beber porque no da tiempo. Estoy aprendiendo el trabajo defensivo, apretar robando balones...
De Blasis llamaba a Mendi ‘el pitbull’.
Aprieta y es intenso, y eso nos viene bien para estar enchufados en el partido.
Pero a veces es como un padre ¿a que sí? Dicen los que le conocen: si te tiene todo el día en el punto de mira es porque cree en ti, si no pasa....
Llevo poco tiempo con él, nos mete mucha caña pero al final nos quiere a todos.
El salto a Primera es fuerte.
Sí. Pero fue más importante cuando subí del filial del Depor al primer equipo, de Segunda B a Segunda. Me costó más coger ese ritmo.
¿Salir de Cubelles para ir hasta A Coruña, aunque antes pasó por el Damm fue duro?
Ya era mayor de edad, pero cuando nunca has salido de casa, tantos kilómetros fuera, cuesta. Luego la adaptación fue buena, estupenda.
Porque estaba muy enraizado en su tierra y apegado a su abuela.
Siempre ha sido muy importante para mí. Estaba enferma cuando me fui y al principio lo pasas mal.
Llevaba en el Depor el 21, el dorsal de Valerón.
Por mi abuela, que falleció el día 21. Y también porque en A Coruña ese número era muy importante. Se lo pedí al delegado y me lo dio rápido.
¿No le da pena lo que le está pasando al Depor?
Cuando me fui se dijeron falsedades. Hablaron cosas que no se ajustan a la realidad. Quiero crecer y la mejor manera era venir aquí. Molestó mucho pero no era por dinero, solo por tema deportivo. Uno quiere progresar. Me dolió.
Van por el tercer presidente en poco tiempo.
Estuvimos a un gol de subir y ahora marchan ahí abajo. Con el nuevo presidente creo que van a cambiar para bien.
Cristóbal ahora pelea contra el Depor.
Lo conozco del Damm, me captó, ha sido muy importante para mí. El paso de juveniles al filial del Depor fue crucial. Estuvimos en el Fabril y en el primer equipo, y me ayudó en todo.
¿Por qué ve Eibar como el sitio más adecuado para crecer?
No soy agresivo y aquí era el sitio ideal para coger otro registro para mi carrera.
¿Es más de chuleta o de marisco?
De chuleta.
Le llaman el ‘Mentalista’.
Me lo puso Héctor de Gol.... (risas).
¿A quién tacharía del Atleti?
A Thomas. Saúl tiene muchos registros, es el jugador total pero para nosotros sería bueno que no jugara Thomas, ocupa mucho campo, es duro.
João Félix parece que no funciona.
Cuando las expectativas son tan grandes, a veces te cuesta al principio, pero es un gran jugfador y lo acabará demostrando.
¿A usted también le pesó ser el fichaje más caro?
No me afectó ni presionó
El Atlético es una bestia negra, el único que no se ha dejado punos en Ipurua. ¿Cómo se les vence?
Pensando en que jugamos en casa y tenemos ganas de conseguir muchas más victorias y que Ipurua sea nuestro fortín.
¿Es ya un armero más?
Me ha sorprendido la gente, cuando saltas a calentar siempre me animan. Me siento querido desde el minuto uno sin hacer nada. Me han mostrado mucho cariño.