Merino y Çolak hunden al Racing y el Deportivo pone la directa
Los goles de los dos debutantes remontaron el de Cejudo. Çolak vio la roja al celebrar su tanto. El Depor, tres victorias seguidas. El Racing, nuevo colista.
El Deportivo sigue agarrado al 'efecto Vázquez', a creer que la salvación es posible. Y es que los gallegos lograron ante el Racing su tercera victoria consecutiva para ponerse muy cerca de la frontera de la salvación. Alegría total de un Riazor que vivió un partido que tuvo de todo. Gol inicial de los cántabros, remontada local con tantos de los dos debutantes (Sabin Merino y Çolak). Euforia que pasó a sufrimiento, ya que el turco vio la segunda amarilla para dejar a los suyos con una menos más de media hora. Derrota para un Racing que suma seis jornadas sin ganar y que hereda el puesto de colista con el que los coruñeses han cargadodurante los tres últimos meses.
De inicio Cristóbal apostó por repetir el once de Anduva y Vázquez, por matizar el suyo con la entrada de Gaku, Koné y el debutante Sabin Merino, pero manteniendo cinco atrás. Realmente la novedad local estuvo en las camisetas al recuperar las franjas verticales en lugar de las polémicas horizontales. Fetiches al margen, el Depor salió muy enchufado y avisando desde el inicio con la estrategia y los latigazos de Aketxe. El Racing, sin embargo, no avisó, golpeó con un gran disparo de Cejudo desde fuera del área. Gran gol, duro golpe y nervios automáticos para los blanquiazules y el partido inclinado hacia Santander a lomos de Yoda. Tan mal lo vio Fernando Vázquez que los 31 minutos agitó el árbol. Montero al banquillo y adiós a la línea de cinco con el debut de Çolak. Y un minuto después, en un córner, empate de Sabin Merino con un martillazo de cabeza tras un córner. El fútbol es así, que suele decirse. Partida nueva, tablas al descanso entre dos equipos justos, con poca fluidez y muchas inseguridades.
Y el arranque del segundo acto mostró un Depor decidido. Combinando bajo las botas de Çolak, disparando con la zurda de Aketxe y un cabezazo de Koné. Y en esa mejoría apareció la magia del turco. Cuatro paredes, un caño y un golazo desde fuera del área. Su talento de vuelta a Riazor, y su carácter también. Con una amarilla tonta por una tangana que no iba con él, celebración con la grada, segunda cartulina y a la calle. Ángel y demonio, Çolak en pura esencia. 2-1 para el Depor y 37 minutos con uno menos para defender el botín. Partido nuevo con dominio para un Racing obligado que comenzó a encerrar a los blanquiazules que se resguardaron 5-3-1 para intentar no perder la ventaja. Y rozaron el empate los de Cristóbal con un cabezazo de Yoda y un zapatazo de Papu, pero Dani Giménez apareció para salvar tres puntos de oro y 'regalar' al Racing el puesto de colista.