Juanjo Narváez se quedó anoche en Madrid con la nariz rota

El infortunio en forma de lesiones no cesa en la Unión Deportiva Las Palmas. Ahora le ha tocado a Juanjo Narváez, que tuvo que retirarse en el minuto 75 del partido de ayer contra el Fuenlabrada tras la salvajada de Chico Flores, cuya patada a destiempo le fracturó la nariz y ambas órbitas. El futbolista del equipo madrileño, que se disculpó a través de las redes sociales, fue, obviamente, expulsado.

Ante la gravedad de la situación, Narváez fue trasladado rápidamente al Hospital Universitario de Fuenlabrada, desde donde fue derivado al Hospital Gregorio Marañón, en Madrid, para pasar por las consultas de oftalmología y maxilofacial. Por prevención, el futbolista colombiano se vio obligado a hacer noche en la capital acompañado por el médico del equipo, mientras el resto de la expedición de Las Palmas regresaba a Gran Canaria.

Según confirmó la propia Unión Deportiva hace unos minutos, Narváez se desplazará esta tarde a Gran Canaria para comenzar ya con su proceso de recuperación. El martes le toca visitar el Hospital Perpetuo Socorro, entidad responsable de los servicios médicos del club, y a partir de ahí se determinarán los pasos a seguir en su proceso de recuperación y el tiempo estimado de baja, en el que se incluyen una cantidad de partidos todavía por determinar.

Imprescindible.

Narváez, cedido por el Betis, se había convertido en un jugador imprescindible para Pepe Mel, punto final del juego de ataque de Las Palmas ante las bajas del ya recuperado Araujo y Rubén Castro, en cualquier caso muy por delante de Pekhart. Hasta la fecha había marcado cinco goles, los mismos que el gigante checo.

El atacante será el nuevo inquilino de una enfermería que sigue llena de efectivos: Drolé, Dani Castellano, Cedrés, Álvaro Lemos, Raúl Fernández, Galarreta y Rubén Castro.