EI Mundial de Clubes de Qatar sí sirve bebidas alcohólicas
Ensayo fructífero para el próximo Mundial de 2022. Sólo hay alcohol en hoteles y la Fan Zone. Beber en la calle está prohibido.
EI Mundial de Clubes de Qatar está sirviendo de banco de pruebas para el país qatarí de cara al de selecciones que dentro de tres años se celebra también en su territorio. La infraestructura, la capacidad organizativa y la seguridad son algunos puntos sobre los que Qatar está trabajando concienzudamente de la mano de la FIFA, organizadora de ambos eventos. Hay un asunto en el que también está experimentando, además con acierto, pese a que lleva un riesgo evidente hacerlo en una cultura tan poco acostumbrada a ello: el alcohol.
Porque sí, en el Mundial de Clubes –al igual que ocurrirá en el de 2022– se puede consumir alcohol en Qatar. No en las calles, algo prohibido, ni tampoco en cafeterías, pero sí en lugares concretos que estos días están repletos de hinchas de Flamengo y del Liverpool. Por ejemplo algunos hoteles internacionales, cuyos permisos para vender alcohol les hacen ser un lugar muy concurrido durante el Mundial. El hotel Intercontinental, a través de su bar, el Belgian Café, ha sido el epicentro de las concentraciones de Flamengo en el torneo.
En la previa de la semifinal ante Al Hilal, los hinchas del Mengao bebieron cerveza y cubalibres en las horas previas al encuentro sin ningún problema. Hubo centenares de aficionados que llegaron a colapsar la recepción del hotel. Tanto, que la seguridad limitó el número de gente dentro y puso unas catenarias por las que se formaron largas colas. Se calcula que unos 15.000 hinchas de Flamengo están estos días en Doha. La mayoría ha pasado por Belgian Café.
Los del Liverpool, bastantes menos –los desplazados desde Inglaterra, pues luego hay muchos venidos desde Asia o propiamente qataríes– han optado por la Fan Zone para calentar los partidos como acostumbran a hacer en su país.
El tema de la Fan Zone es el más llamativo y novedoso de este Mundial. Había cierta polémica sobre si se vendería alcohol o no en este recinto público, pero finalmente la decisión ha sido que sí. Es el único lugar al aire libre de Qatar en el que es posible consumir alcohol.
Por 5 euros, un precio bastante económico, se puede adquirir una pinta que permita disfrutar de los conciertos y actividades que además se ofrecen. "Es más barato que en los alrededores de Anfield", bromea John, un veterano curtido en mil batallas. "Eso sí, nos han dicho en un reportaje para una televisión local que no aparezcamos brindando. Contradictorio". Varias mesas de hinchas del Liverpool se llenan en poco tiempo de vasos vacíos de cerveza.
Quedan tres años para que Qatar se convierta en el eje central del planeta fútbol. En un radio de apenas 40 kilómetros convivirán aficiones de 32 países. El alcohol, algo muy extendido en la cultura futbolística, también estará presente, al menos en hoteles y Fan Zones. Un paso importante y con el que Qatar experimenta con éxito estos días. De hecho, no ha habido problemas. "Mi mensaje es que no será un problema beber en Qatar en el Mundial. Pero también he de decir que creo que no debe ser el debate central. Yo invito a los que vengan a que exploren la cultura rica que tiene Qatar, la del mundo árabe. Es una gran oportunidad para conocernos", resume Hassan Al Thawadi, secretario general de Qatar 2022.