La epidemia de bajas deja tocada la zaga del Leganés
Aguirre no podrá contar ante el Celta con Siovas, Omeruo, Marc Navarro y Rosales, éste sancionado. No tiene carrileros diestros y le quedan sólo tres centrales sanos.
Al Leganés los problemas en defensa se la han convertido en plaga. Peste que dejará para el próximo partido liguero ante el Celta (más que un partido, la enésima final) sin apenas efectivos en defensa a Javier Aguirre. Siovas se lesionó ayer la rodilla izquierda ante el Sevilla (el asunto podrá ser serio). Omeruo estará fuera, mínimo, hasta mitad de mes por problemas musculares. A ello se une que Marc Navarro será también baja, mínimo, casi hasta enero y que Roberto Rosales vio en el Pizjuán la quinta amarilla.
Resumiendo en efectivos, el Vasco no podrá contar con carrileros derechos puros y apenas le quedarán tres centrales natos (Bustinza, Awaziem y Tarín) para los tres puestos con los que suele salir de inicio el Lega. Los tres, por cierto, son diestros, esto es, están más preparados para ejercer como centrales por ese costado que para ocupar las vacantes de líbero o central zurdo, aunque Awaziem en la primera posición lo hizo ayer más que bien frente al Sevilla.
Habrá que experimentar
El caso es que es probable que Aguirre tenga que tirar de laboratorio y experimentar con fórmulas alternativas. Una ya la desplegó en la pradera de Nervión en el choque frente al Sevilla. Cuando Siovas tuvo que dejar el césped en el 5’ (en verdad se lesionó a los 20’’) en lugar de dar entrada a Tarín, un central, prefirió desplegar a Kevin Rodrigues, un carrilero zurdo. Silva se desplazó al centro para dejar al luso en el carril izquierdo.
“Como es zurdo, nos daba una salida natural de balón al costado contrario como suele hacer Dimitrios”, explicó en sala de prensa el entrenador pepinero. No es descartable que sea la fórmula que repita frente al Celta para equilibrar esa posición. Así, además, liberaría a Tarín para ocupar el carril diestro. El valenciano es más central que lateral, pero en alguna ocasión ha ocupado ese hueco, eso sí, casi siempre en defensas de cuatro miembros y con un corte defensivo, no atacante como exige la presencia de tres centrales.
Plan B para el lateral
El plan B para este puesto sería usar a dos atacantes reconvertidos a carrileros, como Aitor Ruibal o Javier Avilés. El primero ya jugó en este puesto frente al Valencia en Mestalla. El segundo, canterano, lo hizo durante unos minutos contra el Atlético de Madrid en la segunda jornada de Liga. Uno y otro son más extremos (e incluso segundos delanteros) que carrileros. Aguirre tiene una semana para ensayar con ellos en este puesto y buscar su adaptación si es que decide tirar de sus servicios.
Podría haber incluso un plan C. En algún partido de pretemporada Pellegrino llegó a usar durante algunos minutos a Óscar Rodríguez como un potencial carrilero, eso sí, más con vocación ofensiva que con intención defensiva. Un plan arriesgado y poco probable, pero aún así presente en la paleta de opciones de este Leganés.