El Bergantiños no se rinde y pelea por jugar en As Eiroas
El club no entiende los motivos por los que su estadio no es apto para disputar la Copa y ha presentado alegaciones a la RFEF. Riazor, opción descartada.
El nuevo formato de la Copa del Rey traerá alegrías a los modestos, aunque en el proceso tengan que lidiar con contratiempos como aclimatar su estadio a las condiciones impuestas por la Federación. Es el caso del Bergantiños, que el pasado jueves recibió una notificación inesperada: As Eiroas no cumplía los requisitos para acoger un partido del torneo y debía buscar una nueva sede para enfrentarse al Sevilla.
Fuentes del club explican a AS que no comprenden los motivos por los que el organismo federativo no acepta que ejerzan de locales en su estadio y apuntan a que cumple todas las condiciones necesarias. Por ello, han interpuesto una reclamación en la que explican por qué no debería haber problema alguno. Por el momento, la RFEF no ha contestado al Bergantiños, que tiene hasta el lunes a las dos de la tarde para presentar otro campo donde jugar.
Vista la circunstancia, la directiva del club se puso manos a la obra y pensó en Riazor como alternativa. El Deportivo, sin embargo, ha comunicado que no es viable la cesión de su estadio porque tan solo hay 48 horas de margen entre el partido de Liga SmartBank frente al Tenerife y el cruce copero. Además, adjunta un informe de Royalberd, concesionaria encargada del mantenimiento del césped del estadio, en el que se informa de que éste está en proceso de recuperación y no es aconsejable que se dispute ahí el encuentro.
¿Por qué no cumple As Eiroas con las condiciones?
En el documento adjuntado del Bergantiños a la Federación, se expone, punto por punto, todos los motivos por los que As Eiroas, o al menos eso asegura la entidad, es una sede válida y que cumple los criterios marcados. Por ejemplo, en lo que respecta al espacio entre terreno de juego y espectadores, el club tiene previsto establecer un pasillo de control con la distancia suficiente como para garantizar la seguridad. También explica que llega a los 350 lux de media de iluminación artificial o que existe una zona delimitada para que los medios de comunicación puedan realizar su trabajo.
Así pues, y con el texto como referencia, la pelota está en el tejado de la RFEF, que debe sentenciar si las medidas expuestas se ajustan a los parámetros marcados. Mientras, el Bergantiños vive la situación desde la incertidumbre y la incapacidad de gestionar la cesión de otro estadio en un margen temporal tan corto. El Sevilla, por el momento, se mantiene al margen y aguarda expectante cuál es su destino definitivo en primera ronda.
Abegondo, otra posibilidad
Si bien el Deportivo de la Coruña ha sentenciado que Riazor no está disponible para la disputa del Bergantiños-Sevilla, se ha solidarizado con la situación y ha ofrecido Abegondo, su ciudad deportiva, para tratar de dar solución al conflicto. Sin embargo, está por ver que sea válido dentro de los requisitos que marca el reglamento. Es más, desde el club no gusta esa posibilidad por las dificultades de trasladar a socios y miembros del club al partido y más en el horario programado (miércoles 18 de diciembre, a las 18:00). En definitiva, podría adoptarse como desenredo desesperado, pero en estos momentos la prioridad es, y seguirá siendo en los próximos días, que As Eiroas dé la bienvenida al equipo de Lopetegui.
Chano Calvo: "La Federación merece que el Bergantiños no se presente"
En una entrevista con La Voz de Galicia, el presidente del club, Chano Calvo, se ha mostrado dolido por no poder acoger al Sevilla en As Eiroas y ha cargado contra la Federación por lo sucedido. "Creo que, como mínimo, nos merecemos una explicación, que nos digan en qué hemos fallado. (...) No se puede hacer esto, darnos un caramelo y luego quitárnoslo. Una opción sería no presentarse, porque es lo que merecen, y si tenemos que pagar una multa, pagarla", expresó contundente el máximo mandatario del club. A dos semanas de dar comienzo la nueva Copa del Rey, todavía hay que resolver algunos trámites. El futuro del Bergantiños es uno de ellos.