La dicotomía del Atlético en los partidos se ha hecho tan evidente que incluso los futbolistas lo asumen públicamente. En las primeras partes rinde menos que en las segundas . Lo dicen las sensaciones y lo confirman los números. Hasta el descanso es un equipo prácticamente inofensivo y después, sin avasallar, sí da una muestra más real de lo que puede alcanzar. En Leverkusen, sin ir muy lejos, no chutó a puerta durante la primera mitad; después lo hizo ocho veces ( dos de Morata, dos de Lemar, dos de Saúl, Correa y Vitolo). Antes que en Alemania, 'regaló' otros cuatro medios partidos sin remates a puerta...
En las primeras mitades ha disparado a portería un total de 23 veces y en las segundas casi el doble, 42 . En goles la diferencia es todavía mayor: cinco antes del descanso (Getafe, Eibar, Mallorca, Valencia y Athletic; sólo el de Mallorca fue a domicilio) por trece a la vuelta. Casi el triple. "Tenemos que conseguir entrar igual en la primera mitad que en la segunda", expone Morata . "Parece que vamos remando siempre contra corriente", lamentaba Saúl en Alemania. El equipo, no obstante, está sobre aviso.
Rival 1T a puerta 2T a puerta 1T totales 2T totales Getafe 2 3 2 3 Leganés 2 2 3 3 Eibar 1 2 2 5 Real Soc. 0 2 4 8 Juventus 4 4 8 11 Celta 3 2 10 10 Mallorca 2 1 9 4 Real Madrid 0 1 3 4 Lokomotiv 4 5 9 11 Valladolid 0 1 2 7 Valencia 2 2 11 4 Leverkusen 1 1 3 3 Athletic 1 1 5 4 Alavés 0 3 2 7 Sevilla 1 4 4 10 Leverkusen 0 8 2 11 23 42 79 105
Lo de Leverkusen no es una excepción, sino una norma. En los cinco últimos partidos del Atlético, su récord de remates a portería antes del descanso es uno . La marca más alta del curso la logró ante el Lokomotiv y la Juventus, cuatro. En Liga, se quedó en tres ante el Celta. En los últimos cursos se han visto muchísimos partidos en los que el Atlético contenía primero y a partir del minuto 60 apretaba y ganaba . Pero este año, con el bajón de pegada, está pagando con muchos puntos perdidos la falta de ambición de muchos primeros tiempos. En el Pizjuán, por ejemplo, dio la sensación de que al equipo le faltó tiempo para remontar . El mismo tiempo que dejó ir hasta el descanso.
Este domingo el Atlético regresa al Wanda Metropolitano y la afición está expectante con lo que se pueda encontrar ante el Espanyol. Si aparece un equipo contemplativo, empezará el runrún desde la grada. Si sale uno agresivo, más allá de lo que diga luego el resultado, el público lo agradecerá. El vestuario, en su autocrítica, ha sido claro: "No podemos regalar la primera mitad". Y el Cholo añade: "Hay que hablar con hechos, no con palabras".