Ødegaard acaba rompiéndose por las patadas que recibe
El noruego no viaja a Granada por culpa de la lesión sufrida en Vigo: "Contusión con edema óseo en el pie derecho".
Tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe. Tantas patadas peligrosas recibe Martin Ødegaard en los partidos que juega con la Real Sociedad que al final acaba rompiéndose. Tenía que pasar antes o después. Porque al noruego le pegan patadas en cada partido con total impunidad, sin recibir protección alguna de los colegiados, y en alguna le iban a terminar lesionando. Amagó después del partido contra el Celta de Vigo, pero su capacidad de sufrimiento y compromiso son de tal calado que Ødegaard se recuperó a tiempo para jugar entre semana contra el Levante. Pero jugó tocado y a la siguiente ya no ha aguantado. Ha acabado rompiéndose, por lo que no viaja con la Real Sociedad a Granada y será baja este domingo en el estadio nuevo Los Cármenes.
"Martin Odegaard presenta una contusión, con edema óseo, a nivel del hueso calcáneo del pie derecho, secundaria a un traumatismo sufrido durante el partido Celta-Real Sociedad (27-10-2019)", señala el parte médico emitido por la Real Sociedad a última hora del día, después de las pruebas complementarias que se le han practicado a lo largo de esta jornada. El jugador noruego "ha comenzado a ser tratado mediante fisioterapia y a realizar trabajo personalizado", y su vuelta a los entrenamientos "será progresiva y en función de la evolución del proceso de recuperación". De momento, es baja para jugar contra el Granada esta jornada y su concurso para recibir al Leganés el viernes 8 de noviembre es duda.
Lo que ha terminado por romper a Martin Ødegaard es la entrada que sufrió ya en la segunda parte del partido de la Real en Balaídos contra el Celta de Vigo por parte de Jorge Saenz, y por la que vio tarjeta amarilla, pero podía haber recibido un castigo mayor. El noruego volvió tocado de Vigo, con un fuerte golpe en su pierna derecha. Pero llovía sobre mojado, porque tranquilamente podía haberse roto una semana antes contra el Betis, con otra entrada criminal de Javi García a su tobillo izquierdo por la que debía haber sido expulsado con roja directa, pero sólo fue amonestado con tarjeta amarilla.
En la Real hay preocupación con las entradas que está sufriendo Ødegaard en este primer cuarto de temporada, aunque el entrenador Alguacil no se queje públicamente. En privado sí que están molestos porque no se ha puesto freno al maltrato con el crack noruego, y al final en pura lógica ha tenido que parar porque no aguanta con los dolores por las entradas que sufre. Si sigue recibiendo ese tipo de entradas por parte de los rivales, acabaran poniendo una queja ante el Comité Técnico de Árbitros. Ya frente al Levante entre semana se le vio incómodo, porque jugó con molestias, pero quiso arriesgar. Y al final del partido ya no aguantó más. Las pruebas médicas han confirmado la lesión, a pesar de que Ødegaard quería seguir intentando aportar. La recomendación de los médicos es que pare, al menos esta semana.