"El equipo tiene que resetearse y recuperar la homogeneidad"
Víctor Fernández considera que el partido contra el Sporting es muy importante para retomar el camino del triunfo y recuperar las buenas sensaciones. Delmás es finalmente baja.
—¿Cómo está el equipo físicamente?
—Siguen los mismos lesionados. Vigaray está evolucionando satisfactoriamente y no sé si estará ya para el próximo domingo. Pombo, igual. Según el cirujano la próxima semana ya podrá entrar con el equipo y, por tanto, también tendrá posibilidades de jugar contra el Las Palmas. Serían dos muy buenas noticias. Delmás no sé si va a poder entrenar mañana o si empezará el lunes con el grupo. Yo ahora mismo no cuento con él para el partido contra el Sporting. Y Zapater viaja a Londres para que lo observe un especialista del problema que tiene y ojalá le dé una solución definitiva.
—Sin Delmas ni Vigaray se queda sin laterales derechos para este partido.
—Está claro que es una situación extraordinaria. No es normal que tú tengas tres laterales derechos y los tres estén lesionados. Lamentablemente se ha dado e incluso se pudo dar el domingo pasado porque tuvo que hacer un esfuerzo Delmás. No es normal que tengas lesionados a Vigaray, Delmás y Zapater, que muchas veces ha jugado de lateral, que el titular del filial esté sancionado por cuatro partidos y que uno de los mejores jugadores de la cantera, Francés, esté convocado con la selección. Tenemos que adaptarnos, inventar e improvisar con otro tipo de jugador y superar esta situación. Una medida excepcional para una situación extraordinaria.
—¿Cómo afrontan el partido contra el Sporting?
—Es un partido importante en el sentido de recobrar el camino del triunfo y recuperar buenas sensaciones. Cuando tú pierdes un encuentro como lo perdimos el domingo pasado, te deja unos efectos bastante desoladores. Para mí fue un accidente tremendo en cuanto a que no nos salió absolutamente nada. Ha habido una necesidad absoluta de resetearnos, de replantearnos las cosas y de trabajar. Y es lo que ha hecho el equipo estos días: mucho trabajo y no buscar culpables y sí soluciones. Las tenemos y creo que las encontraremos para el domingo.
—¿Una victoria en El Molinón podría suponer un gran refuerzo para el grupo?
—Ganar es muy importante. Yo le doy mucha importancia a cómo se gana y cómo se pierde. Hemos tenido partidos en los que no hemos conseguido el mejor resultado, pero el equipo ha dado buenas sensaciones y no ha sido superado ni ha estado a merced del rival. El domingo pasado sí que lo estuvimos y hemos tratado de encontrar soluciones a problemas que nos planteó el rival. El equipo tiene que resetearse, nos faltan jugadores importantes y el primer paso es recuperar la homogeneidad y ser un equipo más compacto, más vigoroso y con más rigor e incorporar a ese ordenamiento la inspiración y la brillantez.
—¿Se plantea jugar con tres centrales?
—En una opción que tenemos. En estos momentos contamos con cinco centrales sanos: los cuatro habituales más Nieto. Ahí tenemos muchas posibilidades y en otras posiciones no tenemos a ninguno. Algo debemos hacer para tener otro tipo de ordenamiento en el campo aprovechando los efectivos que tenemos y cubriendo el gran vacío que tenemos atrás y arriba.
—Ahora que Luis Suárez ya lleva varios partidos sin marcar se hacen más importantes los goles de la segunda línea y en este sentido Soro cumplió frente al Mirandés. ¿Tiene opciones de repetir en el once?
—Los partidos siempre te dejan algo que puedas rescatar y una de las cosas que dejó fue que Soro recuperó esa viveza y movilidad. Llevaba muchísimos meses sin marcar y encontró un gol en La Romareda en una situación complicada. Fue muy valiente y decidido para entrar en el área y fue un gran remate de cabeza a pesar de que es bajito. Eso demuestra que para meter goles tienes que pisar el terreno que te corresponde y tener la actitud para rematar. En este sentido, Soro fue un mensaje positivo que dejó el partido y tiene muchas opciones de jugar.
—Hay una serie de futbolista como Kagawa o James que están por debajo de su nivel. ¿Cómo se recupera a estos jugadores?
—Cuando hay un buen funcionamiento colectivo es más fácil que las individualidades brillen. Por tanto, es necesario encontrar un buen funcionamiento colectivo para dar a cada jugador el especio que le corresponde. Yo creo que he dado oportunidades a casi todo el mundo. Los únicos que no han jugado de titulares son Ratón, Guitián, Bikoro y Linares. En una plantilla de 24, que sólo haya cuatro jugadores que aún no han disfrutado de una oportunidad es muy significativo cuando tan solo llevamos un cuarto de competición. Para nosotros es muy importante recuperar a esos jugadores y conociendo la actitud y el comportamiento de esos futbolistas, se recuperan jugando y dándoles confianza. Y uno también debe tener en cuenta qué otros jugadores pueden entrar en esas posiciones y qué es lo que te pueden aportar. Ese es el segundo problema, ya que uno puede tener un diagnóstico claro, pero la solución depende de más factores. Yo espero y deseo que ellos mejoren sus prestaciones individuales, pero para ello debemos ayudarles colectivamente todos.
—En cinco de los seis últimos partidos el equipo se ha puesto por detrás en el marcador. ¿Qué importancia tiene golpear primero?
—Es fundamental. Es muy importante adelantarte y meter la primera que tengas porque cambian mucho las pautas. Es algo que tiene una gran influencia en Segunda y a nosotros nos está costando. Ojalá que sea el domingo. No me importa no adelantarnos si al final ganamos, pero siempre es mejor.
—El equipo aún no ha marcado ningún gol a balón parado. ¿A qué cree que se debe?
—Creo que no tenemos especialistas a pelota parada. Tenemos buenos golpeadores, pero no especialistas. Y cuando hablo de un especialista me refiero a un jugador que te ponga en juego el 90% de la pelota parada, que es lo más importante. Y una vez que la pones en juego, están los movimientos y la ejecución. No somos un equipo que tengamos jugadores regulares o constantes en el golpeo y eso nos limita muchísimo. Por ejemplo, un jugador muy regular en el golpeo era Pep Biel. Era un jugador que de diez balones, nueve te los ponía en juego en zonas en las que había posibilidades de remate. Igual lo tenemos y el problema es mío porque no he encontrado ese jugador. Es algo que tenemos que mejorar porque ahí tenemos un déficit tremendo respecto a los demás. Y tampoco tenemos muchos cabeceadores.
—¿Qué Sporting espera?
—Su entrenador hizo muchos cambios en el último partido respecto al anterior. Metió muchos más jugadores de vigor y mucha fortaleza, como dos mediocentros muy poderosos como Javi Fuego y Cristian Salvador. Renunció a un delantero para jugar con un mediapunta y dos jugadores muy abiertos, también modificó la línea defensiva con la entrada de Molinero, que defiende muy bien y es contundente, y fue un equipo que intentó ser más vertical y agresivo. Creo que eso lo van a trasladar y lo van a intentar multiplicar jugando en casa. Entiendo que nos intentarán hacer una presión alta y debemos tener recursos para superar esa presión porque imagino que su salida será muy fuerte, ya que es algo habitual en El Molinón. Ese es el Sporting que espero, un equipo ágil, de transiciones muy rápidas y con un presupuesto alto para competir por el mejor objetivo.
—¿Espera algún refuerzo del mercado del paro?
—Todos habéis publicado que hay algún objetivo. El club está mirando esas posibilidades, que son muy limitadas. Hay que valorarlas y calibrar muy bien lo que te pueden maniatar de cara al futuro, pero uno no puede pensar a medio y largo plazo, ya que de aquí a enero quedan diez partidos. Faltan varios jugadores, no sólo uno, y aunque el mercado se abra el 1 de enero, el día 2 no van a estar aquí para jugar el primer partido. Los jugadores no quieren venir el primer día de enero. Los jugadores de Primera se esperan dos o tres semanas para ver cuál es el mejor destino para ellos. Eso es lo que tenemos que valorar, que son muchos partidos hasta terminar de cerrar la plantilla. Yo creo que si se puede hacer algo ahora, se hará. Hay algún elemento que pudiera incorporarse, pero tampoco lo veo fácil. Ni ahora ni en el mes de enero.