Una incógnita llamada Isco
Sólo ha jugado 104 minutos de los 900 posibles y perdió su sitio en la última convocatoria de la Selección. Debe despegar ya para ganarse su sitio.
Gran incógnita y casi inédito. Son las dos afirmaciones que mejor definen la temporada de Isco, su séptima ya en el Madrid en la que, entre lesiones y preferencias de Zidane, sólo ha jugado 104 minutos de 900 posibles. El malagueño ha venido contando cada vez menos desde que fichó, por 30 millones y desde el Málaga, en el verano de 2013. Desde entonces, este es el porcentaje de minutos que ha actuado temporada a temporada: 58%, 71%, 56%, 42%, 53%, 33% y, finalmente, 11% esta campaña.
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Isco tendrá una nueva oportunidad de volver a ganarse su espacio en el partido de Mallorca, en el que la medular está en cuadro por las bajas de Modric, Lucas Vázquez y Kroos. El de Arroyo de la Miel no ha vuelto a tener protagonismo desde que cayera lesionado el 28 de agosto en el bíceps femoral de su pierna derecha. Antes de eso sólo había disputado 15 minutos en la primera jornada ante el Celta y había sido titular en la segunda ante el Valladolid, en el que el Madrid no pasó del empate. Después de recuperarse de su lesión se quedó sin disputar ningún minuto ante el Brujas y jugó los últimos 20 frente al Granada, justo cuando al equipo casi se le escapa la victoria. Isco necesita una actuación redonda y Mallorca le ofrece esa posibilidad.
Su temporada irregular le hizo también saltar de la última convocatoria de Robert Robert Moreno. Uno de los principales objetivos de Isco, que insistió en quedarse en el Madrid este verano, es estar en la próxima Eurocopa (a sus 27 años ha sido 38 veces internacional y marcado 12 goles).
