Kubo, otro ex frente al Madrid
La cantidad de cedidos y antiguos jugadores madridistas están muy presentes en este inicio de temporada blanco. El japonés, en el Mallorca, es el próximo.
El inicio de temporada del Madrid ha estado plagado de reencuentros. En siete de diez partidos ha tenido enfrente a alguien con contrato vigente o pasado en el Bernabéu. El próximo, gracias al final de la 'Cláusula del miedo', será Kubo. El japonés recibe con su Mallorca este sábado (21:00 horas, Movistar LaLiga) a los que fueron sus compañeros en verano.
Inmune en Liga
En Liga ha habido ese morbo en seis jornadas. Ante el Valladolid (1-1), algo difuminado: sólo Óscar Plano, que asistió en el gol del empate, tuvo minutos. Otros dos productos de La Fábrica como Javi Sánchez y De Frutos no entraron en la lista y Lunin se quedó en el banquillo. Los tres últimos están a préstamo y aún no han debutado. Contra el Villarreal, Albiol completó un encuentro que acabó en 2-2. Aún hubo un empate más con un ex delante: un 0-0 con un Atleti en el que Saúl fue titular, Adán y Llorente (salió en la segunda mitad) suplentes, y Hermoso (decisión técnica) y Morata (sanción) ni se vistieron.
Mejor resultaron las otras tres experiencias de este estilo. En la jornada 4, el Madrid se sobrepuso a la rebeldía de Mayoral (aún cedido) y Melero, que hicieron los goles granotas del apretado 3-2. En la 5, los de Zidane dieron un golpe de autoridad con un 0-1 ante el Sevilla de Lopetegui, Reguilón (titular) y Chicharito (entró en la segunda parte). En la 8, la previa al parón de selecciones, no le generó muchos problemas Soldado, que cayó 4-2 con su Granada.
Noche para olvidar en la Champions
Lo peor llegó en el estreno en Champions, en el que fue vapuleado (3-0) por un PSG muy superior. En París lucieron tres ex: Di María, con un doblete que no le costó celebrar por todo lo alto; Sarabia, con una titularidad que le consagró en la élite europea y colaboró para su debut con la Selección; y Keylor Navas, que dos semanas antes había abandonado de aquella manera el club y salía del duelo sin ningún tiro recibido y, por lo tanto, ningún gol encajado.