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REAL MADRID | LA INTRAHISTORIA

Haland, al alcance del Madrid tras ser pulido por Solskjaer

El ariete noruego está de moda tras su gran inicio de temporada. A Haland se le relaciona con el United por la afinidad con el técnico.

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Haland, al alcance del Madrid tras ser pulido por Solskjaer

A muchos les sorprenderá, pero el análisis técnico de Haland, el joven noruego de 19 años del Salzburgo que sigue el Madrid y que es la sensación de este arranque de la temporada, durante sus inicios en el primer equipo del Molde, dirigido por aquel entonces por Ole Gunnar Solskjaer, era contundente: "No es un rematador natural, no es un finalizador de talento. Pero tenía una extraordinaria capacidad de aprendizaje y mucha sangre fría". En esto último, se parece al hoy entrenador del Manchester United, el asesino con cara de niño, como se le conocía en sus días de futbolista.

Solskjaer no presume de haberle enseñado a rebajar los batidos de su corazón justo antes de tomar una decisión, eso viene de serie, con eso se nace. La leyenda noruega le ayudó de otro modo: le dedicó horas de entrenamiento, colectivo y específico, para que supiera decidir cada vez mejor. Esos movimientos que le hacen tan diferente, esa visión de 360 grados, ese paso calculado a la ruptura, esa ecuación corporal bien resuelta que le permitió mejorar el remate es trabajo, y muchos consejos de entrenador.

Luego está esa calma, ese comportamiento en el campo como si estuviera en el patio del colegio. Esa es su manera de entender la vida: con diversión, sin entender de presiones. Bromista hasta el exceso, a menudo con jugarretas que sólo entiende él, pero nunca con malicia, Haland se ha tomado todo lo que ha venido con la tranquilidad de un veterano. Lo que tenga que venir, vendrá. Se le relaciona con el Manchester United, por la obviedad de compartir nacionalidad con el entrenador. Ciertamente tiene pinta de ser futbolista que acaba de llegar a la élite, pero que se quedará. En Noruega está a años luz de la atención mediática de Martin Odegaard, la mayor estrella deportiva en décadas. Pero se le sigue con los dedos cruzados para que se confirme lo que promete.