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REAL ZARAGOZA

"Somos capaces de lo mejor y de ganar en cualquier lugar"

Víctor Fernández mantiene la máxima confianza en su equipo y asegura que lo de Dwamena "ha sido un golpe directo al plano anímico del grupo".

Actualizado a
Víctor Fernández.
ALFONSO REYES

—¿Cómo está el grupo después de lo de Dwamena?

—Estamos en estado de shock. Es una noticia de un impacto terrible para la convivencia del grupo por lo inesperado y por lo que a priori puede tener de dimensión. Ha sido un golpe directo al plano anímico del grupo porque es un chico muy querido por la plantilla. Siempre dando abrazos, siempre teniendo una sonrisa, siempre con una actitud de ayudar a los compañeros… Cualquiera que tuviera un contratiempo de esta envergadura afecta a todos, pero en este caso especialmente porque es un chico que se deja querer, es muy noble y tiene un gran corazón.

—No queda otra que seguir sin Dwamena porque la competición no para…

—Uno tiene que afrontar esta situación intentando superar esta adversidad. Debe servir para hacernos más fuertes. Nosotros debemos seguir hacia delante porque no queda otra y estar todavía más unidos para conseguir el triunfo en Soria y poder brindárselo a él. Debe ser un motor para superarnos y endurecernos.

—¿Urge encontrar un sustituto en el mercado?

—Estamos acelerando cosas que son un sinsentido. El tratamiento de Dwamena merece un gran respeto. Es una cuestión de humanidad y aquí únicamente hay un dueño de la información, que es el jugador. Y secundariamente, el cuerpo médico y las instituciones, ya que está cedido en el Real Zaragoza y pertenece al Levante. Por tanto, no nos anticipemos a algo que no existe ahora. ¿Tiene un problema? Sí. ¿Es un problema importante? Sí. Pero el que lo tiene que explicar es el propio jugador, nadie más. Hay una información del club con un diagnóstico muy claro y tanto el Levante como el jugador tienen derecho a buscar y apurar otras vías. A partir de ahí se abrirá un proceso que en estos momentos no existe. La lógica dice que si hay un vacío en una plantilla por una lesión o enfermedad de larga duración, habrá que tomar decisiones, pero éste no es el caso en estos momentos.

—El Zaragoza ya lleva cuatro partidos sin conocer la victoria. ¿Urge ganar en Soria?

—Siempre hay necesidad de ganar. Si ganas un partido, en el siguiente también tienes esa necesidad. En estos momentos el triunfo es más necesario porque venimos de tres empates y una derrota, que para mí fue un accidente total y absoluto. Una vez repasado el vídeo, me parece que es uno de los partidos más difíciles de gestionar de todos los que he tenido en mi vida y uno de los partidos con peores condiciones físicas de los jugadores. Había jugadores en el banquillo y fuera de la convocatoria en peores condiciones que los que jugaban, pero el médico y el entrenador no pueden decir todo lo que acontece dentro de un grupo. Fue una situación muy difícil y aun con todo, tuvimos 55 minutos en los que no dejamos llegar al Cádiz a la portería. Tuvimos tres oportunidades de gol, nos metieron gol y después aún tuvimos una ocasión clara. A partir de ahí estuvimos a su merced y caímos con justicia, pero como veníamos de tres empates da la impresión de que el equipo está a la deriva. Vamos a llegar algo mejor a Soria con algunos jugadores. Otros me preocupan porque no están empujando lo que yo creo que deben empujar en cuanto a su recuperación y mejoría, pero vamos a llegar mejor.

—El Zaragoza sólo ha logrado una victoria en diez partidos en Segunda en Soria. ¿Qué le parece?

—Ya me han comentado que es un campo muy malo para nosotros como visitante, pero da igual porque somos capaces de ganar en cualquier lugar y seguir con la misma línea que estábamos hasta ahora, a excepción de esos 35 minutos contra el Cadiz porque somos un equipo capaz de lo mejor. Sigo teniendo la máxima confianza y lo único que pido es que se mejoren una serie de cosas de salud. Lo demás no me preocupa.

—El equipo ha encajado seis goles en los últimos tres partidos cuando en las primeras jornadas demostró una gran solidez defensiva. ¿A qué se debe?

—Hay una serie de partidos seguidos y yo sé cómo están mis centrales. Sé quién recupera antes y a quién le cuesta más y que vienen jugadores con lesiones importantes y hemos tenido un ritmo de partidos que de cara a la recuperación es una línea más sensible y hay que tener mucho cuidado. Son cosas mías que me tengo que guardar. También hemos perdido a Vigaray, que para nosotros es un baluarte en cuanto a que te da presencia física y altura en el juego aéreo, tuvimos que hacer jugar de lateral a un central que llevaba cinco meses sin jugar al fútbol, nos han metido goles a balón parado que no nos habían metido anteriormente y en minutos que no nos tienen que meter… Todo eso nos ha debilitado defensivamente y es algo que tenemos que recuperar porque lo hemos hecho bien en las primeras jornadas. Es algo que debemos mejorar porque si no es un lastre que hasta ahora no lo habíamos sufrido.

—El otro día se vio un poco falto de ritmo a James. ¿Cómo está viendo su evolución?

—James es el que menos me preocupa. Evidentemente, no tenía el mismo ritmo que otros porque únicamente ha jugado dos partidos y para tener ritmo tendrá que jugar. Disputó los noventa minutos, tuvo que soportar trabajos que a lo mejor no le correspondían, terminó bien y ha hecho tres entrenamientos esta semana bastante mejor. Está lejos del nivel que mostró la temporada pasada, pero hay cuatro o cinco jugadores que me preocupan mucho más que James en lo que es el tono físico.

—Linares no estaba entrando en las convocatorias. ¿Va a contar más con él después de conocerse la baja de Dwamena?

—Sin lugar a dudas. Es lógico. Nosotros en las convocatorias estábamos llevando a tres delanteros: Pombo, Luis Suárez y Dwamena. Ahora, al faltarnos uno de esos tres delanteros, Linares entrará en la convocatoria. En primer lugar porque está entrenando bien, ya que yo no le voy a regalar la convocatoria. Si no estuviera entrenando bien, no entraría. Y si entrena bien y con normalidad, siempre me gusta llevar tres atacantes y al no estar Dwamena, Linares tiene muchas opciones de ir.

—Con la ausencia de Dwamena, que es un delantero totalmente distinto a lo que hay en la plantilla, ¿va a cambiar la forma de atacar del Zaragoza?

—Los dos delanteros que tenemos son muy diferentes. Pombo es un jugador que la mayoría de las veces la quiere al pie y eso ya te va a condicionar. También parte de unas posiciones muy diferentes a las de Dwamena y Linares es un jugador que vive en espacios más cercanos a la portería y necesita que lo asistan porque es un rematador. Tampoco tiene la velocidad que tienen Dwamena y Pombo. El que juegue de los dos nos va a cambiar mucho la forma de concebir nuestro fútbol de ataque.

—Con los problemas físicos de algunos jugadores, ¿se puede cambiar el planteamiento para que el partido no sea tan de ida y vuelta?

—Aún no te sabría decir con quién voy a poder contar. Si fuera profeta del pasado habría habido un jugador al que no hubiera puesto, pero desgraciadamente no lo soy y debo adelantarme a las circunstancias. Ahora hay cuatro o cinco jugadores que están muy lejos de cómo me gustaría que estuvieran, pero es normal porque sé lo que les ha ocurrido. Vamos a darles un poquito de tiempo y ya tenemos la experiencia de lo que nos ocurrió frente al Cádiz.

—Soro falló esa última ocasión que le pudo dar la victoria al Zaragoza frente al Málaga y contra el Cádiz se quedó fuera de la convocatoria. ¿Cómo lo ha visto anímicamente? ¿Ha podido hablar con él?

—No he tenido tiempo porque terminamos el partido el jueves por la noche, hubo un entrenamiento de recuperación el viernes y el sábado ya activamos. No asociéis el fallo del gol con la no convocatoria. Teníamos problemas físicos serios en otras zonas del campo donde él no podía resolverlos y tuvimos que modificar mucho a última hora con el problema de Lasure o Delmás. Lo veo bien, pero está claro que tiene que mejorar su nivel porque está jugando lejos del nivel que puede aportar. Se tiene que soltar, ya que parece que tenga grilletes en su fútbol, y debe recuperar la inspiración. Debe jugar con más atrevimiento, pero tiene una ventaja que le diferencia de muchos: la actitud de trabajo en los entrenamientos. Así seguro que volverá a recuperar esa magia que nos ha demostrado.