El Barça de Víctor Valdés se asoma al abismo

El Inter aplastó al Barça en el Estadi Johan Cruyff. El 0-3, obtenido con aparente facilidad por los neroazzurri en presencia de toda la cúpula deportiva del club (Abidal, Planes, Bakero, Amor) y de sólo 909 espectadores, abre el debate sobre la política de Víctor Valdés, que ha decidido no reforzar a su equipo juvenil con jugadores del filial. La apuesta aparenta integridad y ética, pero el club deberá prepararse para los resultados. El bicampeón está al borde del abismo después de dos partidos que ha saldado con dos derrotas y se asoma al abismo. Ya no tiene margen de error y, de momento, está obligado a ganar los dos siguientes partidos contra el Salavia de Praga.

Un golazo de falta directa de Oristanio rompió el partido antes del descanso. Sin jugadores diferentes como en otra época han sido Munir, Collado, Abel Ruiz, Riqui Puig o el mismo Ansu Fati en la competición, el segundo tiempo fue coser y cantar para el Inter, que celebró a lo grande la victoria. Primero hizo el 0-2 con una buena aparición y golpeo de Gianelli en el segundo palo. El 0-3, una combinación entre Attys, Gnonto y Colombini, tres jugadores que no habían sido titulares, premió el espíritu de equipo del Inter y golpeó fuerte al Barça. Conociendo a Valdés, es más que improbable que cambie su política, muy legítima por otra parte. Pero para un equipo con dos Youth League y dos Final Four más en Nyon en el currículo de la competición, caer a las primeras de cambio sería muy duro. Mucho más en el año de la inauguración del Estadi Johan Cruyff.