Zidane medita volver al sistema de tres centrales o al 4-4-2
El 4-2-3-1 con el que el equipo naufragó en París no parece una opción. Zidane intenta parar la sangría de goles en contra: 9 goles en 5 partidos.
Zidane medita a estas horas como hacer frente al complicado partido ante el Sevilla. El Madrid visita al líder en una situación complicada, con muchas bajas en el centro del campo y habiendo dado muestras de una preocupante debilidad defensiva. La secuencia de goles encajados ha sido la siguiente: uno ante el Celta, uno ante el Valladolid, dos frente al Villarreal, otros dos frente al Levante y, finalmente, tres en París. Nueve goles en contra en cinco encuentros, a 1,8 de media, demasiado para optar a cosas importante esta campaña.
Enfrente, el domingo, estará el Sevilla de Lopetegui, que ha construido un equipo rocoso. Para la cita seguirán faltando Isco, Valverde y Modric. Esto ha provocado que el técnico francés esté dándole vueltas a cambiar el 4-2-3-1 que utilizó en París con tan mal resultado por el sistema con tres centrales o por el 4-4-2.
Zidane probó los tres centrales en los últimos dos partidos de pretemporada ante el Salzburgo y el Roma. Hubo luces y sombras con ese dibujo en el que Hazard juega como delantero, acompañando a Benzema. De esta forma el belga se desentiende de cualquier tarea defensiva. Por otro lado, Marcelo (que es duda para este partido del Pizjuán) brilla más en ataque. En realidad, el centro del campo acaba teniendo cinco hombres. Los dos carrileros, Kroos y Casemiro y la duda sería si Zidane echaría mano de Bale o de James.
La otra opción que baraja Zidane es el 4-4-2 que ya utilizó en el partido ante el Villarreal que acabó con empate a dos tantos. Casemiro y Kroos se mantienen en la medular, Lucas Vázquez en la derecha y la duda vuelve a estar entre Bale y James (Vinicius parece tener pocas opciones). Con este dibujo, de igual manera, Hazard queda liberado de cualquier tarea defensiva, siempre jugando como segundo delantero junto a Benzema. De una manera u otra, el 4-2-3-1 con el que el equipo naufragó en París no parece una opción para el domingo en el Pizjuán. La prioridad de Zidane es que el equipo vuelva a tener el balón y la iniciativa.
Manu Sainz analiza la actual situación de Zidane