Leo Messi y Luis Suárez, ante la lesión más traicionera de todas
Ambos jugadores sufren del sóleo, el peor músculo de diagnosticar. Messi ha apartado de su mente el partido ante Osasuna del sábado.
El sóleo es un músculo que nunca avisa, puedes estar bien un día y al siguiente vuelven las molestias". Así de claro se expresan dentro del vestuario cuando alguien pregunta por la recuperación de Leo Messi y Luis Suárez. Ambos se lesionaron en el sóleo de la pierna derecha y continúan de baja.
El caso más llamativo es el de Messi, ya que se rompió el pasado 5 de agosto en su primer día de entrenamiento. Si bien el comunicado médico no especificaba el tiempo de recuperación, se filtró que podría estar entre dos o tres semanas fuera de los terrenos de juego. Superado el plazo marcado, Leo sigue sin recibir el alta. Estuvo muy cerca, pero el pasado viernes acabó con malas sensaciones en el sóleo durante un entrenamiento con el grupo y el sábado ya no saltó al campo con sus compañeros.
¿Una recaída? No ¿Un paso atrás? Evidentemente, sí. Ahora Messi vuelve a realizar trabajo en solitario. Ya ha apartado de su mente totalmente el partido ante Osasuna y piensa en los quince días que tendrá por delante para acabar de ponerse a punto con la vista puesta en el partido ante el Valencia del próximo 14 de septiembre.
Desgaste. El problema del sóleo es que es un músculo que empieza a fallar generalmente en jugadores que acumulan mucha tralla y desgaste en su carrera. A partir de los treinta años suele ser el quebradero de cabeza de muchos que empiezan a sufrir las consecuencias de tanta exigencia. "Es un músculo que parece que estás bien, que ya está curado, y haces un esprint o un salto y ¡pam! te vuelve a joder". De esta forma tan clarificadora se manifestaba Xavi Hernández durante su último año en el Barcelona tras vivir varios episodios de lesión en el sóleo.