Irán cede y permite a las mujeres ir a los estadios de fútbol
Podrán ver el 10 de octubre el partido de clasificación para el Mundial frente a Camboya. FIFA amenazó con apartar a su equipo de Qatar 2022.
EI próximo 10 de octubre se acabará el veto impuesto en Irán por la revolución islámica de Jomeini de 1979 y las mujeres podrán entrar a los estadios de fútbol. El ultimátum de la FIFA, que amenazó a Irán con excluir a su selección de la fase de clasificación para el Mundial de Qatar en 2022, ha tenido efecto.
Infantino escribió una carta al presidente de la federación iraní y el viceministro para temas legales y provinciales del Ministerio de Deporte, Yamshid Taqizade, confirmó que "las mujeres que lo deseen podrán adquirir entradas y ver en el estadio Azadí de Teherán el partido que Irán disputará el próximo 10 de octubre frente a la selección de Camboya valedero para la clasificación para la Copa del Mundo de 2022". En la carta, Infantino recordó a las autoridades iraníes la presencia de las mujeres de su país en el pasado Mundial de Rusia, torneo en el que Irán se enfrentó a España.
El veto a las mujeres estaba vigente desde hace cuarenta años, pero en los últimos tiempos el pulso entre los sectores reformistas y conservadores de la República Islámica a propósito de la segregación de sexos se había intensificado. La amenaza de la FIFA con expulsar a Irán de la próxima Copa del Mundo ha sido definitivo para conseguir derribar la imposición de los más radicales.
Irán está en el grupo de clasificación C de la zona asiática y competirá con Irak, Baréin, Hong Kong y Camboya. El ministro Taqizade confirmó que las mujeres podrán asistir desde octubre a todos los partidos de clasificación para el Mundial, tal y como ha exigido la FIFA.
El veto islámico a la mujer ha provocado situaciones tensas en Irán. Se han llegado a producir detenciones de mujeres que fueron descubiertas en los estadios disfrazadas de hombres, con barba y pelucas postizas. Por contra, las autoridades iraníes han hecho la vista gorda con las extranjeras que han querido ver partidos de fútbol en Teherán. Pero el veto islámico incluso ha llegado más lejos. El pasado febrero, según varios medios del país islámico, la televisión estatal iraní habría cancelado la emisión del encuentro de la Bundesliga alemana disputado entre el Bayern Múnich y el Augsburgo al ser arbitrado por una mujer, la árbitra alemana Bibiana Steinhaus.
Durante las últimas cuatro décadas organizaciones como Human Rights Watch han batallado para acabar con el veto a las mujeres impuesto por la República Islámica de Irán, pero hasta que no ha llegado el ultimátum de la FIFA nada había conseguido acabar con la prohibición a las mujeres de presenciar los partidos en directo, en los estadios. Infantino se apunta otro tanto como presidente de la FIFA.