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GIRONA 1 - SPORTING 1

Los porteros y el VAR provocan el reparto de puntos en Montilivi

Aitor García y Borja García logran los goles de sus respectivos equipos en un partido intenso, con mucha tensión, que no se decidió hasta el pitido final.

Actualizado a

Dos veces hubo que recurrir al VAR ayer en Montilivi y las dos beneficiaron al Girona. A pesar de ello, el Sporting pudo llevarse la victoria porque se adelantó en el marcador con un golazo.

de Aitor García muy cerca del final, pero Borja García puso las cosas en su sitio para repartir los puntos, en una jugada que se revisó en el video por la posibilidad de un fuera de juego previo.

Pero los porteros Juan Carlos y Mariño fueron realmente quienes impidieron que el partido tuviera más goles. El meta local fue la pesadilla de Djurdjevic, mientras que el visitante lo fue para Borja García. Esos futbolistas fueron ayer los mejores artilleros.

Alternativas en el juego

El partido fue intenso y tuvo alternativas en el juego. Sin embargo, el VAR lo condicionó cuando Trujillo Suárez tuvo que revisar una entrada de Damián Pérez sobre Borja García en el centro del campo y dejó con un hombre menos a un Sporting que se multiplicó hasta el final.

A pesar de las acometidas del equipo de Unzué, el equipo de José Alberto se defendió con orden y tuvo en última instancia la seguridad de Mariño. No obstante, los asturianos no renunciaron a golpear primero y lo consiguieron por medio de Aitor García, que jugó el cuarto de hora final y que ya había avisado antes en otro disparo que acabó de rebote en el larguero.

Con muy poco tiempo para evitar la derrota, Marc Gual se encontró con el único desajuste defensivo sportinguista y la precipitación de Borja López para poner en bandeja el empate a Aitor García.

Ahí volvió a entrar en juego el VAR, pero la revisión volvió a beneficiar al Girona. No había el fuera de juego que se analizaba en el pase a Gual. El videoarbitraje pudo decidir también en la última jugada del partido pero se consideró involuntaria la mano de Unai Medina que acabó en córner. Hubiera sido demasiado castigo para el Sporting.