La familia fundadora del Rayo pide "recuperar la humildad"
El tataranieto de Doña Prudencia Priego ha enviado a AS una misiva en la que hace un llamamiento para que se produzca un "viaje de vuelta a los valores fundacionales del club".
Los precios de los abonos para la próxima temporada han supuesto la última fractura entre la directiva y la afición del Rayo. El último paso dado por las peñas franjirrojas ha sido emplazar al club a sentarse en una mesa de negociación en las próximas 24 horas, tiempo en el que además han levantado "las medidas en contra de la campaña de abonos" (su llamamiento al boicot de la misma y los piquetes informativos en las inmediaciones de las taquillas del estadio).
Precisamente, esta situación ha hecho que los familiares de Prudencia Priego, la madre y hada madrina del Rayo en su fundación, hayan enviado una misiva a AS haciendo una llamada al club y al presidente del mismo, Raúl Martín Presa, para no perder los valores que siempre ha abanderado la Franja: humildad, solidaridad e identificación con un barrio obrero para el que el Rayo es más que un equipo de fútbol.
Ésta es la reproducción íntegra de la carta:
El Rayo se enfrenta a su propia historia.
El Rayo Vallecano ha ligado siempre su historia al trabajo humilde y a la comunidad. Es cierto que eran otros tiempos (el equipo cumple ahora 95 años), pero desde su nacimiento como club, los jugadores, chavales del barrio de entre 12 y 16 años, se desvivían por ganar partidos mientras compaginaban el fútbol con sus trabajos o estudios. Ellos mismos cuidaban del campo o lo rodeaban de alambre los días de partido y era mi tatarabuela Prudencia, la fundadora, la que se encargaba de lavar y coser los trajes.
La solidaridad con los vecinos del barrio también es un valor íntimamente ligado a la historia del Rayo. Si un jugador o exjugador sufría una desgracia, se organizaba un partido para recaudar dinero, incluso si pasaba algo en el barrio todo el equipo se unía para ayudar. Y aunque estemos hablando de un club casi centenario, no hace falta irse tan atrás para ver que los valores del equipo siguen siendo fundamentales para los que formamos el club: un caso muy sonado y reciente fue el de la señora Carmen, a la que, con 85 años, le llegó una orden inmediata de desahucio en noviembre de 2014. Carmen tenía que abandonar su vivienda a la fuerza y lo que se encontró al salir por la puerta de su casa fue una enorme ola de solidaridad en el barrio y entre la afición del Rayo, que culminó con la plantilla y el entrenador del equipo comprometiéndose a pagar el alquiler de la nueva casa.
Y aquí llega ahora la explicación del título de esta carta, escrita desde las manos que llevan la misma sangre, ilusión y ganas de ayudar que tenía doña Prudencia en 1924. La actual directiva, encabezada y encabezonada por D. Raúl Martín Presa, está rompiendo el cordón umbilical que une al equipo con la gente. Vallecas es un barrio conocido en toda España por sus problemas estructurales, con un paro muy superior al resto de los distritos de la ciudad más rica de España y, por eso, se le ha pedido a la directiva que ayude a los seguidores a animar a su propio equipo, pero desde los despachos no se quiere escuchar lo que ocurre en la calle. Nosotros, como familiares directos de la fundadora, también hemos solicitado en reiteradas ocasiones tanto a la directiva como a sus patrocinadores, que se vuelva a los valores fundacionales del club, especialmente al de la humildad, y que se deje de dar una imagen que no es real.
Ojalá todo esto se convierta en un breve descanso y, como reza el vídeo promocional del club, sea “un viaje de vuelta” real a los valores fundacionales del club.
*Raúl López, tataranieto de Prudencia Priego, fundadora del Rayo Vallecano en 1924.