Sesión física en el campo de golf sin Lodi, Saponjic ni Kalinic
Octavo entrenamiento en San Rafael con otra sesión física, de carreras. Los fichajes ausentes por el pasaporte a EE UU. El croata, por tratamiento individualizado de carácter preventivo.
Octava sesión de la estadía del Atlético en Los Ángeles de San Rafael y otra vez a correr. La plantilla se ejercitó esta mañana en el campo de golf, dividida en dos grupos, Koke al frente del primero, cronómetro en mano, recibiendo las felicitaciones del Profe Ortega, preparador físico, y sus dos ayundes, Carlos Menéndez y Daniel Castro, y con siete ausencias: los cuatro porteros (su entrenamiento siempre es alternativo y nunca participan de estas sesiones sino que tienen trabajo individualizado con Pablo Vercellone, preparador de porteros del Cholo) y tres jugadores de campo. Lodi, Saponjic y Kalinic.
Los dos primeros fue por tema burocrático: ambos se estaban sacando el pasaporte para viajar a Estados Unidos, donde el Atlético continuará su preparación con una gira desde el 21 de julio. El serbio, además, antes de volver a Segovia deberá pasar por Madrid: hoy su presentación con el club rojiblanco en el auditorio del Wanda Metropolitano a las 13:00. Aunque se entrena con el equipo desde el lunes, con permiso especial del Benfica, club del que procede, faltaba un papel por firmar y hasta ayer no se hizo oficial.
Kalinic y las cargas de trabajo
Después de la temporada pasada y esa mancha, la de las casi 50 lesiones musculares de la plantilla, la planificación de esta temporada está siendo más minuciosa que nunca. Se trabaja duro, siempre con el Cholo, con Ortega, pero también se miden mucho las cargas de trabajo. A lo largo de la semana, Savic, Adán u Oblak, han tenido sesiones individualizadas y alternativas de carácter preventivo. Esta mañana le tocó a Kalinic, según informaron desde el club. Por eso el croata faltaba en la sesión del campo de golf. Un hombre de negro, sin embargo, de ese color viste en esta 2019-20 el cuerpo técnico de Simeone, corría como uno más con los de rojo, los jugadores. Es Nelson Vivas, su tercero, a quien en esta estadía en San Rafael es común ver en ese lugar. Haciendo abdominales, participando en las carreras, poniendo centros al área, dándole clases a Lodi o subiendo las interminables cuestas de la urbanización desde el campo de fútbol a su hotel de concentración, el Segovia Sierra, tres kilómetros y medio de distancia, aguantando como uno más las palizas del Profe. Esas que después, cuando las agujetas pasan, se convierten en fortaleza.