Laboratorio de pruebas
El Barça, sin sus vacas sagradas y LaLiga atada, experimenta ante un Huesca que se la juega. Valverde estrena tridente con Boateng.
Colista contra virtual campeón, el Huesca-Barça no es tan fácil para los quinielistas como aparentan los 49 puntos que les separan en la clasificación (sigue el partido en directo en As.com). Por diferentes razones pero con el mismo fondo, Piqué, Busquets, Rakitic, Sergi Roberto, Messi y Suárez se han quedado en Barcelona para preparar la vuelta contra el Manchester United. Así que mientras Valverde cuida a su tropa, Francisco quema las naves con el Huesca, que a seis puntos de la salvación se cree legítimamente con opciones. Lo ha explicado bien su presidente, Agustín Lasaosa: "Contra los grandes nos crecemos". El Huesca ha peleado los dos partidos de la temporada ante el Madrid y se apuntó una heroicidad contra el Sevilla (2-1). Juega bien, gusta y existe la sensación, por los partidos que se le han escapado a última hora (Mestalla, Bernabéu), que podría tener más puntos.
Valverde estuvo humanamente contradictorio en la rueda de prensa de ayer. Dijo que había que hacer "un esfuerzo mental para concentrarse" en el partido pero al tiempo admitió que las circunstancias “son las que son”. Además de las seis bajas, es difícil pensar que arriesgue con Jordi Alba, Lenglet y hasta el mismo Coutinho. Se ganó ese derecho con la victoria ante el Atlético y lo del miércoles en Old Trafford dejó cierta sensación de superioridad azulgrana, pero tampoco aplastante. Sería lógico inclinar todas las atenciones al martes aunque a Valverde, entrenador cartesiano, tampoco le gusta nada dar sensación de pasotismo por los campos.
El Alcoraz se ha tomado el partido como un acontecimiento. Habrá lleno, pero la tarde no está para hacer fotos a los cracks azulgrana. Ni siquiera a Dembélé, que reaparecerá después de su lesión ante el Lyon. Francisco amenaza con un sistema que suena a otra época, 5-2-3, con Chimy, Ferreiro y Enric Gallego arriba y el Cucho esperando su oportunidad como revulsivo.
El Barça estrenará tridente: Malcom, Boateng y Dembélé. Mientras el brasileño suda y se gana cada minuto que juega, el alemán ha aceptado su suplencia con una amabilidad lejos del carácter rebelde de sus años mozos. Pero al Barça todavía le faltan diez puntos para ser campeón y tampoco está de vacaciones.
Murillo y Boateng, a escena
Los dos 'remiendos' del Barça en enero, Jeison Murillo y Kevin Prince Boateng, desaparecidos casi desde su llegada, darán señales de vida hoy. El préstamo del defensa, procedente del Valencia por 1,2 millones, se produjo en una situación límite: el Barça no sabía cuándo volvería a tener sano a Umtiti y Vermaelen se había lesionado con Bélgica. El club se guardó una opción de compra de 25 millones pero Murillo no ha jugado ni un minuto en LaLiga. Boateng ha jugado 60' y fue la respuesta al caso Munir, apartado cuando se negó a renovar. El de El Escorial se marchó al Sevilla y el Barça cerró con el Sassuolo una cesión poco provechosa de momento.