Boadas: "Rubi es el técnico que todo presidente desea"
El expresidente del Girona apostó por él para dirigir al primer equipo rojiblanco la 2012-13. "Nos enseñó que subir a Primera era posible", dice a AS. Disputaron el playoff de ascenso.
En una cadena de favores, el Girona le debe tanto a Joan Francesc Ferrer 'Rubi' como Rubi al Girona. El club gerundense fue el que le dio la oportunidad de ser entrenador en el fútbol profesional y el ahora técnico del Espanyol les hizo ver que el ascenso a Primera era posible.
Rubi llegó al Girona como segundo de Salamero la temporada 2011-12 y juntos sellaron una salvación milagrosa. Un curso más tarde, Salamero dijo no a la oferta de renovación por parte del club gerundense y la directiva barajó dos nombres: Rubi y Albert Ferrer. Joaquim Boadas, por aquel entonces presidente del Girona, no dudó: "Rubi siempre fue nuestra primera opción tras el no de Salamero porque queríamos darle continuidad a lo que se había construido al final de la temporada anterior. Además, Rubi me parecía un entrenador muy válido porque sabía que él llevaba todo el tema táctico y me gustaba. Y por suerte, no nos equivocamos", explica Boadas a AS.
El paso de Rubi por Girona fue corto, pero intenso, porque aquella campaña 2012-13 disputó el playoff el ascenso a Primera: "Fue un sueño para nosotros. El trabajo que se hizo fue increíble y ahí se demostró que Rubi era y es un gran entrenador. Nos quedamos a las puertas de Primera, pero hizo soñar a toda una ciudad con su fútbol", sigue el expresidente del Girona.
¿Y cómo fue la relación con Rubi? "Excelente. La sintonía que había con él era total y es que, para mí, es el entrenador que todo presidente querría tener. Yo le decía que era un técnico psicólogo. Es cercano, con los jugadores tiene una relación increíble y, además, le encanta el fútbol. Es optimista, ambicioso y un estudioso, y me encantaba cómo preparaba los partidos, lo sabía todo del rival".
Tras un curso exitoso, el Barcelona llamó a su puerta y no le pudo decir que no. "La oferta que le hicieron era estratosférica, y pese que nosotros estábamos negociando con él para renovarle, no la podíamos igualar. Creo que siempre se portó muy bien con el Girona porque él era libre para negociar, y decirle que no al Barça es muy complicado. Siempre fue sincero conmigo y por eso creo que es el mejor técnico que ha tenido el Girona en su historia, por delante incluso de Machín", apostilló un Boadas que solo tiene palabras de elogio para él y al que le encantaría que volviera al Girona en algún momento.
Montilivi espera a Rubi y no hay duda de que "se le debe recibir de la mejor de las maneras. Hizo cosas increíbles aquí, nos enseñó que subir a Primera era posible, y para mí siempre será un hombre de la casa". Boadas no fallará a su cita hoy con el Girona y tiene claro cuál es su deseo: "Que hoy pierda Rubi, pero que gane todos los partidos que quedan porque se merece lo mejor. Si le dejan, hará grande al Espanyol".