Quini salvó un punto para el Granada que aprieta el ascenso
Timor adelantó a Las Palmas, pero el lateral empató sobre la bocina para dar un punto que deja al Albacete a dos unidades y al Málaga a tres. Las Palmas continúa muy lejos del playoff.
Quini en el último suspiro rescató un punto para el Granada para empatar el gol de Timor. Un empate que aprieta el ascenso directo. El Albacete se queda a dos puntos y el Málaga a tres. Mientras, Las Palmas suma un empate más que mantiene lejos del playoff.
Granada y Las Palmas llegaban al partido con muchas ausencias. Diego Martínez pudo recuperar a Montoro y Quini, mientras que Mel apostó por Cala y Srnic en el once. Los nazaríes empezaron con el balón y dos ocasiones a balón parado. Pero, con el paso de los minutos, Las Palmas empezó a sentirse más cómodo y hacerse con el dominio del esférico. Lo intentó Timor desde lejos y Rubén Castro desde dentro del área. El partido estaba muy competido y las ocasiones iban llegando a cuentagotas. Castellano la tuvo desde dentro del área, pero apareció la mano de Raúl y Rui tuvo que salvar a su equipo del testarazo de Cala. Y, en el último suspiro, tuvo que aparecer providencial Castellano para evitar el gol de Mesa.
Tras la reanudación poco cambió el guion. El dominio era alterno y las llegadas contadas. El partido estaba trabado, con faltas que impedía que hubiera continuidad en el juego. Peñalba tiró alto un balón franco dentro del área y Raúl blocó un centro de Castellano cuando ya Rodri olía el gol. Y, en el 56', Timor hizo una fea entrada por detrás a Montoro cuando ya había pasado el balón y el cerebro nazarí se tuvo que ir lesionado. Poco cambió. Entró Alberto y Azeez dio un paso adelante, pero el Granada no conseguía hacerse con el dominio, ni tampoco Las Palmas. Timor intentó sorprender desde el centro del campo, pero Rui, de nuevo, apareció salvador. Y en el córner el balón a punto estuvo de colarse en la portería granadina, pero Azeez la sacó con la mano tras tocar en la cabeza. Y, en el 71', Rubén Castro centró atrás y Timor llegó sólo para abrir el marcador. El Granada tenía que remar contracorriente. Y reaccionó llegando con peligro. La tuvo Quini, también Ojeda. Pero el gol no llegaba y Las Palmas supo gestionar el tramo final entre pérdidas de tiempo. La desesperación nazarí llevó a la imprecisión. Pero la fe nunca la pierde. Y en el enésimo balón parado, el balón quedó en el área y Quini la enganchó a la escuadra para poner las tablas. El Granada creía y Ramos tuvo dos para dar la victoria. Pero el marcador no se movió más y cada uno se llevó un punto que sabe a poco...