Eusebio se luce en un conjunto camaleónico
El entrenador del Girona no se ata a ningún sistema de juego. Los rojiblancos ya han utilizado el 3-5-2, 4-1-4-1 y 4-3-3.
Eusebio Sacristán ya cayó de pie en el vestuario del Girona cuando la dirección deportiva rojiblanca apostó por él para suplir a Pablo Machín y sigue demostrando que no se equivocaron al atarle para dirigir al primer equipo. El grupo bendice su gestión tanto en las victorias como en las derrotas y su metodología, algo que alaban especialmente los futbolistas de la plantilla. No es extraño escuchar, después de un partido en el que se han utilizado varios sistemas, que “estamos muy trabajados”. Y eso es algo que gusta tanto dentro como fuera del vestuario gerundense.
La respuesta del equipo está siendo buena y Eusebio ya se ha ganado tanto a sus jugadores como a la afición. En sus inicios se crearon ciertas dudas, pero su trabajo está siendo bueno y gusta que sea un equipo impredecible. Al técnico le gusta que su equipo juegue con un 4-3-3, pero nunca ha tenido problemas en apostar por un 3-5-2, en especial en el inicio de curso, para tratar de atar las primeras victorias y poco a poco ir apostando sus “matices”. El 4-1-4-1 es también otro sistema de juego que ha dado alegrías al Girona esta temporada, histórica fue la victoria ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu (1-2) y es que este Girona no es tan fijo como lo fue el del curso pasado con Machín.
Es cierto que Eusebio tuvo que adaptarse a unos jugadores que estaban definidos para jugar con el 3-5-2 (de esta manera lograron el ascenso a Primera hace dos temporadas), pero los ha acabado convenciendo y demostrando que con el 4-1-4-1 y el 4-3-3 son igual de fuertes. Este curso se suman menos puntos que la pasada, pero hay felicidad igual.
Jugadores como Portu, Borja García, Pere Pons, Ramalho y Granell han ganado en polivalencia y han visto como su fútbol ha dado un paso adelante. Eusebio y su cuerpo técnico no solo han hecho olvidar a Machín sino que ha encontrado en sus jugadores a sus máximos aliados.