'Las Colchoneras', la peña pionera del Atlético de Madrid Femenino
Es la primera dedicada al equipo de Sánchez Vera. En apenas seis meses tiene 216 socios. 136 sin vínculo con el masculino. "Es que ellas enganchan". Les emociona el partido del Wanda.
Cuando ellas, el Atlético Femenino salten al césped del Wanda Metropolitano para jugar ante el Barça y hacer historia, habrá 216 personas en la grada que se mirarán entre ellas y no podrán evitarlo, sonreír, también la hicieron, unos meses antes, y agarradas fuertes de su mano, de las chicas de José Luis Sánchez Vera. Son los miembros de una peña, Las Colchoneras, la primera de la historia del equipo femenino rojiblanco. Se fundó el pasado septiembre. Se ideó un mes antes, en agosto, a apenas un kilómetro y medio de ese lugar donde As reúne a varios de sus miembros, los que pueden escaparse de sus trabajos un mediodía de este marzo, a los pies de Neptuno. Casilda Rivilla, Rubén Caravaca, Esther Auriol y Ruth Cano. Secretaria, vicepresidente y fundadoras. La presidenta, Carmen Trillo, no pudo escaparse, ellos hablan por ella. Con brillo en los ojos.
Lavapies. Pasado verano. Casilda, Rubén y Carmen se encuentran, con Mónica, Eli y Chema. Se conocen desde hace tres años. De la grada del Cerro. De los partidos del Atlético Femenino. Son tres del puñado de público que no falta cada domingo en el Cerro para ver jugar a ese equipo aupado por Lola Romero y María Vargas desde la nada. "Entonces éramos pocos. Familia, amigos, nosotros. Pero, ¿sabes qué pasa?, que sólo falta que las vea una vez para que vuelvas: enganchan", dicen. A ellos les pasó. De eso hablaron en ese encuentro por casualidad, en la plaza de Lavapies. "¿Por qué las chicas no tienen peña?", se preguntaron, en voz alta. Venía rondando desde la final de Copa de Mérida. El "y si" llegó justo después.
Y si la hacían ellos. Y si lo hacían sí. El 18 de septiembre el "y si" tenía un sello del club: se fundaba la primera peña del Atlético Femenino, la suya. Tenían claro el nombre. Las Colchoneras. Seis meses después, son ya 216 socios. Y con un dato que contiene el crecimiento del fútbol femenino en España, en el club: "De ellos sólo hay 80 socios del equipo masculino". Los 136 restantes se han hecho porque son del femenino, a secas. "A alguno ni les gustaba el fútbol". Pero se hicieron adictos de los partidos del equipo de Sánchez Vera.
"Es muy diferente. Más cercano. Sin intereses. De verdad", exclaman. Tanto que eso, engancha. Habla Casilda con una clarividencia que sólo queda escuchar: "Cuando alguien te pregunta sólo tienes que decirle: 'Ven a verlo, de verdad que te va a gustar'. Y ocurre. Que vienen y se quedan". Sólo por eso, con invitarles a que vayan y vean. En una semana de vida en la peña ya eran 80, 90 personas. Y con nombres ilustres como el de Inés Sabanés, concejala de Ahora Madrid, portavoz del Ayuntamiento, miembro del que fuera una vez equipo de balonmano femenino del club y la única que, de momento, ha reconocido públicamente que formas. Pero hay más miembros relevantes, de más partidos. Gracias al empuje de Las Colchoneras el Ayuntamiento de Madrid instaló una placa en el edificio donde se fundó el club.
Madres, políticas, pasión
"También hay muchas madres de jugadoras", confiesa Rubén. Esther cuenta cómo a ella le llegó. Fue por su padre. "Oye, hay una peña...". No sabe cómo se corrió la voz, pero ahí estaba, tras el verano, como un terremoto en el Cerro. "Que hay una peña del equipo de chicas, la primera". En seguida se apuntó. También es fundadora. Por eso no suelta esa bufanda que lleva en la mano durante toda la entrevista. "Las Colchoneras", se lee. El apellido que desde septiembre alzan todos en los partidos del Femenino con orgullo. Hasta tienen canciones propias. Rut y Casilda se atreven a tararearlas.
Música de La Macarena. Su voz. Se unen las de Rubén y Esther, aunque sea bajito. "Dale a tu cuerpo alegría colchonera, que tus palmas animan cada día a las guerreras". Se lanzan, comienzan otra: "Y ya estamos aquí, colchoneras a rugir, porque somos las mujeres del Atlético de Madrid". Pero su calado va más allá de eso. Se palpa en su web, lascolchoneras.es, con noticias, opinión y hasta enlaces a la wikipedia de cada una de las jugadoras. También mesas redondas, como la del 25 de marzo en el Ateneo de Madrid, con María Vargas, la jugadora María Fernández, del Conquense, la presidenta Trillo, la periodista de ABC Laura Marta. Vuelven a cantar, "y ya estamos aquí...", como si estuvieran en la grada. En su testimonio otro dato que habla de lo mismo, de cómo ha crecido en tan poco el fútbol femenino, el Atlético. "Todos los fines de semana el Cerro de llena". Ya no son sólo familias, amigos y ellos. "Son mil, mil y pico, tres mil". Serán 67.000 en el Wanda Metropolitano ante el Barça.
"Este es un grupo imparable", exclaman. Ellos compraron las entradas según salieron a la venta, los primeros. "No sabes cómo emociona ver cuánta gente ha venido detrás". Para los socios es gratis, para los que no, pagan, entre cinco y diez euros. "Y lleno", musita Rubén. Los demás suspiran un uf. Y hablan de Amanda ("es de las futbolistas que hacen que sucedan cosas"), del equipo que son ("no sólo individualidades"), de su goleadora, Ludmila: "Coge el balón y...". Y eso, que a todas sus canciones las tapa un grito. El del goooool. Lo esperan el domingo. Para dejar la liga sentenciada ante el Barça, el rival, mientras el Femenino hace historia con esas 67.000 personas en la grada, historia del fútbol femenino en Europa. Casilda, Rubén, Rut y Esther siempre contarán que estuvieron allí. Y que también fueron primeros.
"Dale a tu cuerpo alegría colchonera, que tus palmas animan cada día a las guerreras...".