NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

REAL SOCIEDAD

La plantilla se defiende de las críticas por falta de actitud en Sevilla

“No supimos adaptarnos al ritmo del Sevilla, pero no hubo falta de actitud”, dice Oyarzabal, ejerciendo de portavoz del vestuario realista.

Oyazabal perseguido por Canales.
AMAIA ZABALODIARIO AS

En el vestuario de la Real se caminó estas últimas horas entre la decepción por la mala segunda parte que hicieron los jugadores en Sevilla y el mosqueo por algunas críticas que recibieron después de ese sonrojarte 5-2. Entienden el enfado de la afición y también las palabras duras que recibieron de los médicos de comunicación, pero no comparten el discurso de que en la segunda parte hubo falta de actitud entre los jugadores que estaban sobre el césped en el Sánchez Pizjuán.

A pesar de recibir cuatro goles en 20 minutos y de ser superados en todas las facetas, en un vendaval que les pasó por encima como una apisonadora, consideran que en todo momento quisieron sobreponerse, pero no encontraron la forma de hacerlo. Nadie duda de la profesional de su compañero, y por eso les molesta que se hable de falta de actitud, porque eso supone dejar de hacer su trabajo, y en ningún momento sintieron que nadie quiso hacer eso. Simplemente creen que jugaron rematadamente mal. Y consideran que aprendieron una cruel lección que no van a repetir, porque ya saben qué no deben hacer. “Cometimos errores que otros días no hemos cometido, eso está claro y todos lo sabemos, pero las ganas y la actitud no se pueden reprochar nunca a esta plantilla”, dice Mikel Oyarzabal, ejerciendo de portavoz del vestuario realista.

El eibarrés es el tercer capitán de la primera plantilla de la Real. Pero ante la baja de Illarramendi y la suplencia de Zurutuza, tuvo que llevar el brazalete en Sevilla. Y como tal, tras el desastre, ejerce. Un capitán de sólo 21 años que irradia madurez por los cuatro costados, y que fue de lo poco salvable del Pizjuán, porque peleó y trató de tirar de sus compañeros en medio de la avalancha sevillista, y aunque se hizo un autogol, marcó dos tantos con los que suma 10 esta temporada, a dos de su mejor marca en Primera. Oyarzabal marca el camino. “Tenemos que analizar lo que hicimos mal, corregirlo y mirar al Levante con ambición. No por 20 minutos malos vamos a cambiar ahora todo lo bueno hecho, nosotros tenemos que seguir haciendo las cosas igual”, dice. Solo así cree que se ganará al Levante, partido clave tras tres jornadas sin ganar para no perder el tren de Europa. “A pesar de que todo se vea negro, yo sigo pensando que podemos pelear por los puestos europeos”, sentencia. Y si un internacional como Oyarzabal lo dice, ¿quienes somos nosotros para llevarle la contraria?

Merquelanz vuelve a ejercitarse con el grupo tras seis meses

En este ambiente un agradable hecho por lo que supone para un joven y prometedor futbolista de la cantera de Zubieta que pudo haber visto truncada su carrera futbolística hasta en dos ocasiones por dos lesiones muy graves de rodilla. Martín Merquelanz entrena de nuevo con el grupo, por primera vez a las órdenes de Imanol Alguacil. Es una gran noticia, seguramente la mejor que ha recibido la Real en las últimas horas, después de haber sufrido una de las goleadas más severas de los últimos años.

Merquelanz, cuando se lesionó en Ipurua.
Ampliar
Merquelanz, cuando se lesionó en Ipurua.AMAIA ZABALODIARIO AS

Merquelanz se lesionó de gravedad el 14 de septiembre, en el derbi gipuzkoano que se disputaba en Ipurua entre la Real y el Eibar. Salió en los minutos finales, con empate (1-1) y con la sensación de que con su velocidad podía desequilibrar el partido. Asier Garitano así lo creía. A pesar de su juventud e inexperiencia. Era su debut en Primera división, el premio al trabajo duro que hizo en Zubieta años atrás. Una noche de viernes especial que se tornó en pesadilla al minuto de pisar el césped de Ipurua. En el primera balón que tocaba la rodilla se le iba y el irundarra caía lesionado. Enseguida se dio cuenta de la gravedad del asunto. Por eso lloraba. Y por eso sus compañeros a su alrededor ponían cara de circunstancias. No se lo podían creer. Les afectó, mucho, tanto que en ese tiempo recibieron el gol que les hacía perder.

La reacción no era para menos. Merquelanz debutaba en Primera tras haber superado una grave lesión de rodilla al final de la temporada pasada, había logrado llegar al comienzo de la pretemporada del primer equipo para tratar de convencer a Garitano. Lo había conseguido y tenía ficha profesional por fin. Pero en su día más esperado todo se volvió oscuro. Empezaba de nuevo para el irundarra un calvario de recuperación, un largo camino que ha concluido en la sesión de hoy a puerta cerrada. Seis meses de recuperación que justo se cumplían este jueves. Se han cumplido los plazos y como hizo en su primera grave lesión, con una capacidad de superación que ha dejado boquiabiertos a los médicos realistas. Ha completado sin problemas el entrenamiento, aunque ahora comienza otro reto, el de coger la forma física cuanto antes para poder jugar minutos de nuevo antes del final de la presente temporada. Imanol lo conoce bien, por precisamente la pasada campaña brillo a sus órdenes en segundo equipo de la Real.