El Girona le arrebata al Barça su primer título

Se tomó mucho más en serio la Supercopa de Catalunya el Girona que el Barcelona y por eso se llevó la final en Sabadell por 1-0 con gol de Stuani de penalti. Los títulos siempre son para el que más los busca, para el que se los toma más en serio y atendiendo a esta regla, el Girona fue un justo vencedor de este torneo ante un Barça de circunstancias que se tomó el partido como un día oposiciones. Los de Eusebio, en cambio, lo afrontaron como la oportunidad de ganar un título ante todo un Barça. Mañana, nadie se preguntará cuál era la alineación de los barcelonistas, sólo quedará en el palmarés de una final en la que el Girona batió al Barça. Que jugara Boateng será una frívola anécdota.

Ambos equipos afrontaron el partido con objetivos diferentes. El Barça quería probar jugadores, el Girona, quería ganar. Valverde formó un equipo que fue una audición a Todibo, que jugó como medio centro en la primera parte y central en la segunda. Si quiere seguir en el Barça, que se quede como central. El francés fue de lo mejor junto a Riqui Puig y Aleña. El resto, incluido los fichajes de invierno, sería mejor archivarlos.

En cuanto el Girona puso toda la carne en el asador, especialmente en la segunda parte cuando entraron nueve titulares habituales y desequilibraron el partido. Un penalti inocente de Collado a Valery nada más iniciarse la segunda parte le permitió a Stuani batir a Cillessen desde los once metros y sumar un título histórico que premia la ambición de los de Eusebio, que demostraron mucha más ganas que los suplentes del Barça. La penitencia para los del Girona es la lesión de Douglas Luiz, quizás un pejae demasiado caro para este éxito.