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PORTUGAL

'Operación blindaje' del Benfica con 5 promesas; todavía queda una joya a tiro...

El club portugués ha renovado a cinco de sus seis mejores proyectos de futuro con una cláusula de rescisión muy elevada. Ya solo queda un jugador por firmar.

El extremo portugués del Benfica, Jota, durante un partido.
El extremo portugués del Benfica, Jota, durante un partido.

El Benfica ha puesto en marcha un plan de futuro para intentar retener a toda una generación de jóvenes talentos que parece prometer mucho. Desde hace unos meses, se ha preocupado de ir renovando a todos esos jugadores con el fin de que permanezcan en el club a cambio de unas mejores condiciones salariales.

Sin embargo, también se cuidan de amenazas externas, ya que en caso de que sea otro equipo el que venga a por sus jóvenes estrellas, deberán pagar un alto precio por llevárselos. Es de sobra sabido que los grandes clubes portugueses son una mina inagotable de promesas que forman ellos o que fichan por muy poco para venderlos más tarde a precios muy altos. Prueba de ello son las ventas de Axel Witsel (40 millones), Ederson Moraes (40 millones) o Nélson Semedo (35,57 millones).

Hasta el momento la operación va viento en popa, ya que de los seis jóvenes más prometedores que tiene, ha conseguido que cinco firmasen un nuevo acuerdo. Desde el mes de octubre Florentino Luis tiene una cláusula de rescisión de 60 millones de euros hasta 2023, exactamente las mismas condiciones del contrato de Rubén Días, que selló su acuerdo en agosto. Ferro cuesta desde febrero 100 millones de euros y también permanecería hasta 2023 en el club. Las cláusulas de Gedson (agosto) y Joao Félix (noviembre) son todavía más altas, puesto que alcanzan los 120 millones de euros. Ambos han firmado también hasta 2023. Hay que recordar que Joao Félix está destacando por encima de todos ellos, habiéndose destapado como un gran goleador y poniéndose en el punto de mira de grandes clubes como el Real Madrid.

Al Benfica ya solo le queda un caso pendiente. Quiere renovar a Jota, el último de sus promesas con un contrato bajo y cuyo acuerdo expira en 2022. Teniendo en cuenta que todos sus compañeros han firmado hasta 2023, se espera que le ofrezcan ampliar su acuerdo por un año más y elevar su cláusula de rescisión, ya que actualmente es de 30 millones de euros. Parece que el plan del Benfica va por buen camino.