Griezmann se reencuentra con la Real como campeón del mundo
La vida del francés ha dado un vuelco desde su última visita. Decidió seguir en el Atlético, ganó tres títulos, renovó, aumentó su galones y su valor se ha quintuplicado.
Antoine Griezmann vuelve a San Sebastián con una vida muy diferente a la de hace unos meses, cuando el Atlético cayó derrotado por 3-0 el 19 de abril de 2018 contra la Real Sociedad. El francés, que se crió en la cantera txuri-urdin desde los 13 años hasta los 23 con los que salió de Donostia para vestir la camiseta rojiblanca, continúa liderando al Atleti, pero en estos últimos meses ha visto como su palmarés, sus galones y su salario han crecido de forma notable.
En aquella visita el Atlético y Griezmann estaban centrados en la Europa League, ya que el partido se producía exactamente una semana antes de medirse al Arsenal en la ida de las semifinales de la competición europea, y el francés seguía dando vueltas a su cabeza sobre la conveniencia de seguir como rojiblanco o de firmar por el Barcelona, que estaba dispuesto a pagar su cláusula de 100 millones de euros.
Desde entonces, el palmarés de Griezmann engordó desde la solitaria Supercopa de España de 2014 hasta la consecución de la Europa League, la Supercopa de Europa y el Mundial de Rusia. El '7' fue el gran protagonista de la final de la Europa League con un doblete ante el Olympique de Marsella en el penúltimo partido como rojiblanco de la temporada 2017/18. Tras finalizar el curso, con algún pitido en la última jornada por su indecisión a la hora de renovar, Griezmann se marchó a Rusia a liderar a la selección francesa sin haber aclarado su futuro.
Cuando todo parecía indicar que su secretismo se debía a haber aceptado la propuesta blaugrana, a un día de iniciar el Mundial publicó un documental donde 'la decisión' era continuar en el Atlético renovando hasta 2023 confiando en el gran proyecto que se estaba llevando a cabo en los despachos rojiblancos, con la llegada de su amigo Lemar al club entre otros puntos. Además, su sueldo subía hasta convertirse en el segundo jugador mejor pagado de la Liga sólo superado por Messi. Su cláusula se duplicó hasta los 200 millones de euros.
Con la cabeza ya centrada en el fútbol, Griezmann afrontó el Mundial con la vitola de líder de una de las principales candidatas al título tras haber perdido la final de la Eurocopa dos años antes como anfitriones. Griezmann encontró en Mbappé su mejor socio en el ataque galo y acabó liderando el título con cuatro goles anotados y tres asistencias y siendo completamente clave en las últimas rondas. El jugador del Atlético marcó en octavos contra Argentina de penalti, en cuartos ante Uruguay, dando una asistencia a Varane, en semifinales asistió a Umtiti en el único tanto frente a Bélgica y en la final marcó de penalti a Croacia además de servir el balón que se convirtió en el tanto en propia de Mandzukic.
Un Mundial, que unido al triunfo en la Supercopa de Europa contra el Real Madrid por 2-4 en el partido de Tallin, donde Griezmann no brilló tras no haber entrenado prácticamente nada por sus vacaciones post torneo de Rusia, convirtió al '7' en gran candidato al Balón de Oro. Finalmente no lo obtendría, sería para Modric, pero Griezmann acabaría en el tercer cajón como Balón de Bronce.
Un Griezmann que con la salida de Gabi también ha subido en galones en la plantilla del Atlético. Actualmente es el tercer capitán del equipo tras Godín y Koke y ya ha portado el brazalete en varias ocasiones este curso. En lo que marcha de curso suma 18 goles y 8 asistencias, participando de forma determinante en 26 de los 60 goles del equipo este curso (43,3%).
Valor quintuplicado
El valor de mercado de Griezmann también ha vivido una gran subida en los últimos meses. El francés ha alcanzado los 150 millones de cotización para la página web especializada Transfermarkt, cifra sólo superada por Mbappé (200), Neymar (180) y Messi (160). Con 27 años Griezmann se encuentra en el punto más álgido de su carrera y ha multiplicado por cinco su valor de mercado desde que salió de la Real Sociedad.
Del equipo vasco partió con un valor de mercado de 30 millones, la cifra de su cláusula que pagó el Atlético en el verano de 2014. Como futbolista txuri-urdin disputó 202 partidos con el primer equipo, donde consiguió 52 goles y 18 asistencias partiendo desde una posición de extremo. Simeone le convirtió en segundo punta, con unos inicios donde alternó titularidades y suplencias hasta ser uno de los mejores atacantes del mundo.
Con libertad de movimientos encontró su mejor versión, pudiendo jugar por todo el frente de ataque y creciendo mucho en el trabajo colectivo, donde pese a ser una estrella continúa trabajando en defensa como el que más. Una característica que refleja también en Francia y que es una de las grandes particularidades de un Griezmann que ahora tiene la Champions entre ceja y ceja y que tendrá que brillar contra su exequipo para seguir teniendo posibilidades en la Liga.
Para su descubridor Eric Olhats, en una entrevista con el Diario de Guipuzkoa, "si no hubiera estado en la Real, jamás habría jugado en el Atlético. Me refiero a la formación. Lo que se le ha dado y lo que le han enseñado en las categorías inferiores y a su llegada al mundo profesional ha sido muy importante. De alto nivel. Luego llegó un momento en el que podía, no digo debía, marcharse y considerar el recalar en un club más poderoso, como hizo con el Atlético. No ha sido el Atlético quien ha construido a Antoine Griezmann, lo que ha hecho es ayudarle a continuar a ser mejor. La Real ha jugado un rol determinante desde el inicio".