Solari pende de la Champions
A nueve puntos del Barça en Liga, se ha quedado sin Copa, el título más asequible, y sólo un triunfo en Europa le aseguraría seguir en el cargo.
El Madrid se perdió en buenas sensaciones y no supo encontrarse en las áreas. En la suya se protegió (sólo recibió un intento de remate hasta el descanso, el peor registro del Barça esta temporada) hasta que los goles (tres en tres tiros culés a puerta) le fueron descosiendo las esperanzas, mientras que en la rival disparó con balas de fogueo (14 intentos sin premio). La consecuencia fue dramática: decir adiós a la Copa, el título más asequible y, por ello, el que acercaba a Solari a continuar tras el verano. Ahora, 21 triunfos (un 72% de los posibles, lejos del 43% con el que cesaron a Lopetegui), seis derrotas y dos empates después, el argentino está ante un todo o nada: sólo levantar la Champions le aseguraría seguir.
Desde el Castilla, como en su día Zidane, Solari saltó al primer equipo el pasado octubre en calidad de interino. Además de las cuatro victorias de salida, quizá fuera esa coincidencia la que le brindase la oportunidad de firmar hasta 2021, un gesto con el que el club le reconoció su buen inicio. Sin embargo, pese a haberse ganado ese derecho, no terminó de descolgarse la etiqueta de provisionalidad. Le dio fuerza el Mundial de Clubes y se la quitó un principio de enero bacheado, con un empate y dos derrotas en la primera quincena.
Solari: de la mejor racha a su momento más complicado
A continuación se sobrepuso sorprendiendo con la mejor racha del equipo, enlazando siete triunfos y un empate de mérito, en el Camp Nou (1-1), con el que se dejó una vuelta de semifinales en el Bernabéu para la esperanza. No parecía ser cosa de azar, sino más bien de lógica porque el Madrid por fin se sostenía en una mezcla provechosa de juego y resultados. Pero llegó un viento inesperado y empezó a tambalear ese castillo de naipes: la derrota frente al Girona, que convirtió la Liga en poco menos que un imposible.
Sobrevivieron luego los blancos al Levante, pero este miércoles el Barça dio carpetazo a otra aspiración, la más asequible. "Es una pregunta extraña. Todos somos responsables de las victorias y de las derrotas", respondió en rueda de prensa Solari cuando le pidieron que valorara su parte de culpa en la eliminación. Pero es en particular el argentino, ya sin la Copa, quien pende de la Champions.