Griezmann entra en 2019 con el mismo buen pie del año pasado
El francés lleva cuatro jornadas seguidas marcando y, en lo que va de Liga, le ha dado al Atlético nueve puntos con sus goles. Además, se está convirtiendo en un gran lanzador de faltas.
Griezmann es el líder de este Atlético. Así se le trata desde el club, así lo ven sus compañeros y así le exigen todos. Mientras él tira del equipo. Lo hizo en el Pizjuán, donde no tuvo su actuación más brillante, pero el gol de falta fue decisivo. El francés empieza el año como acabó 2018, viendo portería: ha enlazado cuatro jornadas marcando, con cinco tantos en ellas. Está en la buena racha.
El francés pasó una minisequía de cuatro partidos sin marcar (ni asistir) en octubre, pero desde entonces se ha venido arriba. En los once últimos partidos, acumula ocho tantos y tres pases de gol. En el tramo final, el promedio es mejor: antes de gol al Sevilla, le marcó al Espanyol y en Valladolid hizo un doblete y dio una asistencia. No hubo un gol en esos tres partidos en los que no participara Antoine.
Su aportación en el equipo también se puede medir por la trascendencia de sus goles, que le han dado nueve puntos en Liga: el del Pizjuán, dos ante el Espanyol (1-0), tres en Valladolid (dos en el 2-3), uno en Leganés (1-1) y dos ante el Rayo (1-0). Sólo Stuani le supera, con un punto más. En casa del Sevilla se repitió la fórmula mágica: gol de Griezmann y paradas de Oblak.
En el caso del delantero, se está especializando también en un arte que no se le daba demasiado bien. A Vaclik sólo pudo batirle de falta directa y de esta manera ya marcó en Butarque. Son dos en esta Liga y los ha conseguido en solamente cinco lanzamientos (40%). En las últimas cuatro Ligas, ha hecho seis tantos de libre directo en 25 lanzamientos (24%), según datos de Míster Chip; en las cinco anteriores, chutó 50 con un 0% de éxito.
Griezmann tiene el listón en los 33 goles que marcó en 2018 en el Atlético y el reto de meterse en el top 5 de goleadores históricos. Ahora no está Costa para echarle una mano, pero él tira de recursos. Por ejemplo, de falta directa. Y si no marca él, trata de darlo: en Valladolid le dio un gol a Kalinic, ante el Mónaco a Koke, contra el Barça a Costa, ante el Athletic a Godín... Este domingo, Saúl le pidió que fuera más ambicioso y que sepa que es "el líder". Con sus números, el galo se apunta esa etiqueta de líder.
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