Rosales: "Sería emocionante seguir en el Espanyol"
El lateral, que enlaza tres titularidades, cree que "la gente fue un poco injusta" con Baptistao. Y celebra su retorno a la 'Vinotinto': "Este año tenemos lindos retos".
El viernes vivió su tercera titularidad consecutiva con el Espanyol pero la primera de ellas con victoria. ¿Al fin?
Evidentemente, estoy contento por haber jugado. Mi trabajo es para competir y en esta nueva etapa intento aprovechar cada oportunidad. Claro que todo eso es mejor cuando se gana, cuando el equipo se puede sacudir una racha negativa que teníamos. Creo que hicimos un gran partido contra el Leganés, fruto de una línea que ya llevábamos aunque sin conseguir los resultados que queríamos. Esperamos poder continuar así en los próximos partidos.
¿Se va notando cada vez más suelto?
Es parte del planteamiento que quiere el míster, de las charlas individuales que tiene con cada uno de nosotros. Cuando juegas más, cuando tienes partidos, aumentas tu confianza, por mucho que en los entrenamientos también trato de dar lo máximo. Y más aún si consigues una victoria.
¿Exige mucho a un lateral el hecho de que Rubi plantee alineaciones con hasta seis jugadores de corte ofensivo?
Es un planteamiento que a mí me gusta, porque una de mis características es subir al ataque. Si tienes el balón es mucho más fácil atacar, incorporarte, ayudar al equipo. No descuidamos que primero de todo somos defensas, que debemos ser sólidos atrás. Y el viernes al fin conseguimos una portería a cero después de unos cuantos partidos. Es la línea a seguir. Yo intento aportar al equipo trabajo y sacrificio.
Y ahora vuelve la Copa. ¿Están motivados, tras la mala racha liguera, para afrontar dos competiciones?
En la Liga pudimos sacudirnos de esa mala racha y ahora pensamos en obtener una victoria para avanzar en la clasificación contra un rival muy interesante y difícil. Quizá el Villarreal no tuvo el mejor comienzo de temporada, pero contra el Madrid se vio su mejora, no hay que fiarse. Nosotros tenemos una buena plantilla para intentar pasar de ronda en esta competición, que es muy linda.
En lo personal, ¿cómo asimila todo un capitán del Málaga llegar a otro club, el Espanyol, para ser uno más?
Es una situación distinta a la que viví en el Málaga, a quienes estoy muy agradecido. Los cambios siempre son difíciles y aquí me tocó pasar por un periodo de adaptación que hasta ahora no había vivido. Pero por suerte lo llevé bastante bien, en parte gracias a la gran plantilla que tenemos. Y yo, en mi línea, he tratado de trabajar desde el primer día para ganarme la confianza de los compañeros y para competir. Para jugar y, por qué no, para aumentar con ello el nivel del grupo.
Incluso podría jugar por la izquierda, aunque están Dídac y Pedrosa…
Sí, yo estoy a disposición del entrenador sea por la derecha o por la izquierda. Incluso de suplente. Hay que estar al lado del grupo para poder disfrutar de victorias como la del viernes.
Y en ese compañerismo está Baptistao, que acabó llorando tras fallar algún gol y recibir silbidos de la grada. ¿Cómo le arropa el vestuario?
Son circunstancias del partido, quizá la gente fue un poco injusta con él porque que yo recuerde, desde que él está en el Espanyol, la afición ha disfrutado de muchísimos goles suyos. Obviamente, uno tiene días más acertados que otros. El viernes fue un día duro para él pero el equipo consiguió una victoria, que al final es lo importante. Es un poco difícil para un delantero no marcar goles, pero son rachas, en el momento en que pueda enchufar una se va a soltar. En lo personal, no me parece justo que la gente le haya tratado de esa manera porque es un jugador que siempre está implicado, que da el máximo y que ha brindado muchísimas alegrías a este club.
Individualmente, a usted esta temporada le trajo otra buena noticia, como lo fue el regreso a la selección de Venezuela.
Sí, fue una noticia bastante buena. Me enorgullece defender la camiseta de mi país, después de casi dos años de ausencia. Siempre trabajé para volver. Y este año tenemos lindos retos, como la Copa América y el comienzo de las eliminatorias (para la Copa del Mundo de Catar-2022), una ilusión que toda Venezuela tiene.
Desde la lejanía, parecía incomprensible que un futbolista de su proyección estuviera dos años sin ir convocado con la ‘Vinotinto’…
Fueron circunstancias puntuales, que ya no vienen al caso comentar. Se manejó de una manera discreta. Yo siempre estuve a la disposición del entrenador. Se entiende que cada evolución tiene un proceso de cambio, y yo intenté siempre desde mi parcela estar preparado, disponible, para cuando fuera convocado. Eso es lo que hice, y lo más importante para la selección.
Al margen de los retos con Venezuela, está su futuro en los clubes. En junio acabará su cesión sin opción de compra y debería volver al Málaga. ¿Qué espera que suceda?
Ahora me enfoco en este momento, porque falta mucho para final de temporada. Lo suyo es intentar jugar, hacer un buen campeonato, y ya veremos lo que puede pasar. Sería emocionante poder seguir en el Espanyol, pero todavía tengo un año de contrato con el Málaga, un club al que estaré siempre agradecido porque me ha brindado la oportunidad de venir a la Liga española, una de las mejores del mundo, y a jugar contra los mejores.
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