Alguacil: un técnico que sabe ganar en el Bernabéu

Imanol Alguacil (Orio, 1971) es un entrenador hecho a sí mismo que ha llegado al primer equipo de la Real Sociedad de rebote, sin pretenderlo. Porque estaba trabajando en el Sanse, el filial txuri-urdin, donde estaba muy bien valorado por su buen trabajo terminando de preparar a las promesas de Zubieta en el último paso antes de dar el salto a Primera. Un puesto que él mismo pidió, porque bien pudo quedarse como técnico de Primera el pasado verano, cuando acudió al rescate de la Real tras la destitución de Eusebio Sacristán. Accedió a hacerse cargo del primer equipo a cambio de que luego volviera al filial. Así ocurrió, y eso que hizo méritos para seguir, sumando 16 de los 27 puntos que disputó la Real con él como técnico. Llegó Asier Garitano, y Alguacil siguió con su trabajo en la última etapa de formación de Zubieta.

Seguía así el oriotarra su camino de preparación para llegar a la élite como entrenador, esa que ya logró tocar como jugador, en el Villarreal, pero sobre todo en su Real Sociedad, con la que llegó a jugar 137 partidos, algunos muy especiales, como el triunfo que logró hace 20 años en el Santiago Bernabéu, marcando incluso uno de los goles, un golazo al estilo de Messi dejando sentados a varios jugadores madridistas. Alguacil ya sabe lo que es ganar en un escenario en el que los realistas sólo han logrado vencer en tres ocasiones en su historia. Seguro que le sirve, a pesar de que le dé reparo hablar de ello.

Natural de un pueblo remero como Orio, y aficionado a un deporte como el remo que siempre infunde carácter y mucho sacrificio, el mismo que intenta transmitir a todos los jugadores que dirige, también ahora a los profesionales de la Real. Es consciente de que está ante su gran oportunidad en un banquillo de la élite, aunque no haya sido un paso buscado, porque era el primero en colaborar con Garitano cuando se le preguntaba por las promesas del filial. Pero le ha costado mucho llegar hasta arriba. Porque eligió el camino más largo y duro. El de empezar desde abajo del todo. Porque comenzó entrenando en las categorías inferiores de Zubieta para ir subiendo en el escalafón, hasta alcanzar el filial realista, al que el año pasado llevó a jugar de nuevo el playoff a Segunda división, algo que no pasaba desde hace décadas.

Después de muchas ayudas como interino (fue ayudante de Santana en el triunfo contra el Atlético antes de la llegada de David Moyes), es ya el máximo responsable técnico de la Real. Gran conocedor de la cantera, por sus manos han pasado las últimas estrellas salidas de Zubieta, como Odriozola, Aritz Elustondo, Kevin Rodrigues, Zubeldia, Guridi Bautista y Mikel Oyarzabal.

R. Sociedad

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