Las doce campanadas del mercado celeste
La prioridad del Celta en enero será aligerar la plantilla. Si hay salidas, llegarán un defensa y un delantero. Puede recibir ofertas por piezas claves.
Roncaglia. No cuenta para Miguel Cardoso y en A Sede verían con buenos ojos su salida. Sin embargo, al polivalente zaguero le queda un año y medio de un jugoso contrato. No contempla la opción de regresar al fútbol argentino.
Júnior Alonso. El defensa paraguayo tampoco entra en los planes del entrenador. Está cedido por el Lille francés hasta el 30 de junio y le vendría bien cambiar de aires para llegar con ritmo a la Copa América del próximo verano.
Radoja. Vetado por la directiva desde el pasado verano, tiene ofertas del fútbol italiano y de Inglaterra. El serbio está dispuesto a seguir en la grada hasta que termine la temporada, cuando concluye su vinculación con el club vigués.
Mazan. Su continuidad dependerá de si se concreta la llegada de un lateral izquierdo en este mercado. Cardoso lo considera un jugador útil y así lo demostró dándole la titularidad en el Camp Nou. El eslovaco tiene firmado hasta 2022.
Emre Mor. Se ha quedado fuera de las dos últimas convocatorias y su situación podría convertirse en insostenible de aquí a junio. Solo en la liga turca parecen dispuestos a apostar por el díscolo extremo.
Maxi Gómez. No se descarta que en enero llegue una oferta muy importante por el ariete. Barcelona y Atlético lo siguen, pero piensan en el charrúa para la próxima campaña.
Iago Aspas. Él mismo ha asegurado durante los últimos días que espera un mercado de invierno tranquilo. Está centrado en recuperarse de la lesión que sufrió en el Camp Nou.
Brais Méndez. Uno de los jugadores de moda en el fútbol europeo tiene una cláusula de rescisión de 25 millones de euros. El Leicester inglés ya lo ha tanteado. Al Celta le toca mover ficha para blindarlo.
Cabral. La directiva no se ha puesto en contacto con el argentino para renovar y desde este martes es libre para comprometerse con otro club de cara al próximo curso. Condenado a la suplencia con Cardoso, una oferta de otro club durante este mercado podría adelantar su despedida.
Lobotka. Desde que ha llegado a Vigo se le ha vinculado con equipos importantes del fútbol europeo cada vez que se ha abierto la ventana de fichajes. Los 50 millones de su cláusula han impedido que se concretara su traspaso.
Defensa. Si algún zaguero abandona el Celta en enero, Felipe Miñambres se lanzará al fichaje de un central o de un lateral zurdo. El mexicano Edson Álvarez es uno de los nombres que está sobre la mesa.
Delantero. La llegada de un punta resulta obligatoria. Hace un año se vivía la misma situación y la contratación del argentino Lucas Boyé fue un fiasco.
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