Jugar contra el Deportivo es una pesadilla para Alcaraz
Lucas Alcaraz se ha enfrentado 16 veces al Deportivo en Primera, Segunda y Copa y sólo le ganó en una ocasión. El resto, 8 derrotas y 7 empates.
El Zaragoza llega a Riazor sin haber conseguido todavía llenar el hueco en su banquillo que dejó el técnico que mañana se sentará en el de enfrente. La marcha de Natxo González hizo más daño del esperado en La Romareda y su alargada sombra, que ya se llevó por delante a Idiakez, amenaza ahora a Lucas Alcaraz. El nuevo entrenador zaragocista todavía no ha encontrado la forma de enderezar el rumbo de la nave maña e intentará hacerlo ante el Deportivo.
El problema es que el conjunto blanquiazul quizá no sea el mejor rival para alzar el vuelo, ya que enfrentarse a los coruñeses ha sido una auténtica pesadilla para el técnico granadino durante toda su carrera. Desde la temporada de su estreno en Primera, con 36 años en 2002, hasta hace un par de campañas, ya rondando los 50, su palmarés refleja la gran dificultad que ha tenido para batir al equipo deportivista, daba igual si como local o visitante: 16 encuentros con un balance de 8 derrotas, 7 empates y una sola victoria.
Y no es que Alcaraz no lo haya intentado por todos los medios. Lo ha hecho en Primera, Segunda y la Copa, y con siete equipos diferentes (el Zaragoza será el octavo de la lista), fracasando con Recreativo, Racing, Murcia, Córdoba, Almería o Levante. El Depor es su bestia negra a la altura de equipos como el Sevilla o el Madrid, a los que también sólo ha vencido en una ocasión.
Su único trinfo, duro para el Depor
El único triunfo de Lucas Alcaraz contra el Depor se produjo en 2013 en el estadio de Riazor. Aquel 0-3 con el Granada quizá no significase demasiado para él, pero sí fue una de las derrotas más dolorosas de la historia reciente blanquiazul. La debacle hizo temblar los cimientos de Riazor y provocó la primera y única pañolada contra Lendoiro, con pitos y cánticos de “vete ya” y “más coruñeses y menos portugueses”. Domingos Paciencia, técnico deportivista en aquel encuentro, dimitió nada más finalizar el choque dejando sin capitán a una nave que ya iba a la deriva. Unos días después se produjo la llegada de Fernando Vázquez, que pese a hacer un gran trabajo para resucitar al equipo no logró finalmente la permanencia. La posición complicada es ahora para el propio Alcaraz, con su equipo en zona de descenso y, aunque con mucha Liga por delante, poniendo su puesto en peligro si no es capaz de sacar algo positivo de A Coruña.
