Lucas Alcaraz se jugará el puesto frente al Córdoba
El entrenador no ha recibido ningún ultimátum, pero ya sólo le vale ganar: una derrota y hasta un empate precipitarían su adiós.
Nadie le ha dado un ultimátum y nadie en el Real Zaragoza desea un segundo relevo en el banquillo, pero Lucas Alcaraz se jugará el puesto este domingo frente al Córdoba. Todo lo que no sea una victoria propiciaría su adiós y la contratación de un nuevo entrenador antes, incluso, de que se abra el mercado invernal, donde se quiere dar salida a cuatro futbolistas de la plantilla (Medina, Buff, Raí y Perone) y contratar a dos centrales.
Alcaraz se encontró un equipo en ruinas, pero el Zaragoza ha ido de mal en peor. Y sus detractores no dejan de crecer. Después de una victoria en seis partidos y de ver cómo el equipo ha ido cayendo hasta posiciones de descenso, el técnico granadino se encuentra ya en ese peligroso estadio en el que se le ve más como un problema que como una solución. De él se esperaba, sobre todo, claridad de ideas y el espíritu y la energía necesaria para levantar al grupo, pero no ha dado con la tecla en un mes y medio de búsqueda, y lejos de detener el derrumbe, lo ha acelerado. El Zaragoza es ahora mismo un conjunto desconcertado y sin identidad, perdido, bloqueado y sin pulso, que no tiene pinta de poder ganar a nadie y que ha hecho de La Romareda un campo abierto en el que todos los rivales retratan al Zaragoza.
Y ya se sabe que no hay nadie más débil que un entrenador de fútbol que no gana partidos. El Zaragoza ya gastó la bala de Imanol Idiákez y ni el director deportivo Lalo Arantegui ni el director general Luis Carlos Cuartero desean un nuevo cambio de entrenador, pero una derrota o hasta un empate frente al Córdoba, penúltimo clasificado y, por lo tanto, un rival directísimo en la pelea por la permanencia, colmarían el vaso y precipitarían los acontecimientos en el club aragonés.
El pasado viernes, en su conferencia de prensa posterior a la derrota frente al Cádiz, Alcaraz se mostró convencido de sacar al equipo adelante y recordó que en su larga hoja de servicios ha pasado por situaciones similares, pero esas palabras deberán tener confirmación este domingo frente al Córdoba o su tiempo en el Zaragoza se habrá acabado.
Lucas Alcaraz, con un balance de una victoria, un empate y cuatro derrotas, únicamente ha sumado cuatro puntos de 18 posibles en sus primeros seis partidos como entrenador del Real Zaragoza. Es el peor inicio de un entrenador del Real Zaragoza desde Javier Irureta, que también sumó cuatro puntos de 18 posibles en la temporada 2007-08. Fueron sus únicos seis partidos al frente del equipo aragonés, que terminó descendiendo a Segunda División ese mismo año. Desde entonces, hasta once entrenadores han pasado por el banquillo zaragocista en la categoría de plata y el de Lucas Alcaraz es el peor inicio de todos ellos.
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